Cuando entre varios interlocutores se aborda la temática de la movilidad eléctrica un factor alrededor del que al final siempre se acaba articulando la conversación es que aún no es lo suficientemente asequible como para llegar a todo el mundo, especialmente los coches eléctricos, y es que el principal motivo por el que soluciones asequibles de movilidad hayan experimentado un crecimiento exponencial este último año es que suponen el primer escalón de este tipo de movilidad.
Y es que patinetes eléctricos, bicicletas eléctricas y motocicletas eléctricas han visto en la actual pandemia un aliado perfecto para crecer como nunca lo han hecho, con fabricantes que emergen con sus apuestas por todas las partes del globo y precios cada vez más competitivos. Hoy mismo hemos conocido una bicicleta eléctrica cuyo precio es el principal reclamo de compra, la Linus ERO 500.
Así pues, mientras que motocicletas, bicicletas y patinetes eléctricos gozan de cada vez precios más competitivos, los coches eléctricos, según una de nuestras fuentes de fatos favorita, el analista Felipe Munoz. también analista de mercados de Jato Dynamics (de donde ha tomado los datos), los coches eléctricos desde su irrupción como modelos fabricados en serie han aumentado su precio sustancialmente.
Para ejemplificar la cuestión ha tomado como ejemplo al que es uno de los eléctricos más vendidos en Europa, el Renault ZOE, que además de gobernar con mano de hierro en Alemania, también lo hace en nuestro país, en España, y cuya versión más vendida dedicamos un artículo a analizar.
Comentaba Felipe Munoz en el post en el que compartía la imagen que se muestra más abajo: "En lugar de bajar, el precio de la mayoría de los coches eléctricos disponibles en Estados Unidos y Europa está subiendo. El Renault Zoe es un buen ejemplo. En Francia, la versión Intens con 80 CV es ahora más cara que hace 7 años. Mientras los precios de los coches eléctricos puros no bajen, la demanda seguirá siendo marginal."
Precio del Renault ZOE eléctrico desde 2012 hasta 2019.
Si miramos la imagen que el analista compartió en su perfil, desde 2012 el precio del Renault ZOE ha ido subiendo significativamente hasta 2015, y desde 2016 a 2019 con la llegada de la carga rápida, más relevante de cara al cliente dada la facilidad de uso que ello aportaba, aumentó de nuevo la media hasta situarse en los 26.580 euros desde los 22.500 euros iniciales.
Cifras que, sin embargo, no están ajustadas a la inflación existente en todo el periodo desde enero de 2012 hasta diciembre de 2019, que según la calculadora de inflación de la zona europea de Statbureau.org es de un 8,74%, por lo que los 22.500 euros que el Renault ZOE costaba por 2012 a día de hoy deberían ser 24.465,50 euros, y el ZOE en Francia en estos momentos parte desde más de 30.000 euros en su versión Intens.
Todo ello está directamente relacionado con un artículo que publicamos días atrás, en el que gracias a un estudio conocimos que el precio medio de cada kWh de batería había pasado de costar a cada fabricante menos de 90 euros, y aun así el precio de los coches eléctricos, no se mantiene, sino que sube. Muchos son los que salen en defensa de estos precios alegando que, efectivamente, si bien es cierto que el coste de un coche eléctrico no decrece sí que aumentan las inversiones por parte de los fabricantes en el campo de las baterías y el aprovechamiento energético.