Si bien los híbridos enchufables son algo de lo más corriente y normal, sólo hay que echar un poco la vista atrás para descubrir que su historia es mucho más reciente de lo que cabría imaginar. Los híbridos de Toyota demostraron que es posible combinar un motor eléctrico y otro térmico, pero fue a los ingenieros de Mitsubishi a los que se les ocurrió poner una batería de más tamaño para crear el concepto híbrido enchufable. El Mitsubishi Outlander fue el primero de los híbridos enchufables en conquistar el mercado. Llegó a tener una cuota de mercado del 70%. Hoy ese porcentaje casi se ha destruido por completo.
El primero de los Outlander salió al mercado a principios de siglo, aunque no fue hasta 2014 cuando hizo acto de presencia la primera versión PHEV. Mostraba 203 caballos de potencia y una autonomía eléctrica de 52 kilómetros con una batería de 8,4 kWh de capacidad neta. Hoy todas esas cifras han crecido, incluyendo el tamaño. El Outlander expande sus proporciones hasta alcanzar los 4,72 metros de largo, 1,86 metros de ancho (sin retrovisores) y 1,75 metros de alto para una distancia entre ejes de 2,7 metros. Por tamaño es rival directo de modelos como el Renault Espace, del Honda CR-V y del Mazda CX-60, entre otros.
Más grande, más potente, más completo
Si bien lo que llama la atención es su nuevo aspecto, no menos destacable es la renovación técnica que sufre el nuevo Outlander PHEV. Para el mercado español están disponibles tres versiones: Motion, Kaiteki y Kaiteki +. De serie incluye elementos como llantas de 18 pulgadas, faros Full LED, sistema multimedia con pantalla táctil de 12,3 pulgadas, climatizador automático bizona, instrumentación digital de 12,3 pulgadas y una larga colección de asistentes a la conducción. En sus versiones más completas puede sumar carga inductiva para teléfonos móviles, asientos delanteros calefactados y eléctricos, tapicería de cuero, techo panorámico y mucho más.
Bajo el capó Mitsubishi vuelve a apostar por la combinación de lo eléctrico y lo térmico. El Outlander PHEV de etiqueta CERO ofrece un motor atmosférico de gasolina y dos motores eléctricos asociados, uno delante y otro detrás. El conjunto desarrolla una potencia máxima de 306 caballos. La parte eléctrica se alimenta de una batería de iones de litio con 22,7 kWh de capacidad bruta que le permite homologar una autonomía eléctrica de hasta 86 kilómetros con un consumo de apenas 0,8 litros por cada 100 kilómetros recorridos (ciclo WLTP). La fuerza se reparte entre los dos ejes mediante un sistema de tracción total que presenta diferentes programas de ajuste y conducción. Acelera de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos y tiene una velocidad punta de 170 km/h.
Una de las claves del éxito de las primeras generaciones híbridas enchufables del Outlander PHEV era el precio. En 2014 el precio original era de 40.500 euros. Hoy, 10 años después, esa cifra ha crecido hasta los 50.700 euros, sin ofertas o promociones. Esa cantidad se asocia con el nivel de equipamiento más básico, Motion. En sus versiones superiores, el Mitsubishi Outlander cuesta 57.300 euros con el acabado Kaiteki y 60.650 euros para la versión Kaiteki+. Todo ello sin ofertas o promociones. Está claro que ya no es tan barato como antes, pero hay que tener en cuenta que no sólo se ha mejorado el rendimiento mecánico, también tiene más equipamiento y calidad que el que nunca ha tenido.