El primer Ferrari totalmente eléctrico de la historia será presentado públicamente a finales del presente 2024. Su comercialización, sin embargo, tardará unos meses adicionales; concretamente, durante los últimos meses del próximo 2025. Pero para seguir con la última fase de su desarrollo y, finalmente, producir en masa el vehículo, la firma italiana ha inaugurado un nuevo edificio adyacente en sus instalaciones de Maranello, el cual es totalmente sostenible.
La marca del cavallino rampante ha invertido alrededor de 200 millones de euros en la construcción del nuevo edificio especialmente diseñado para albergar su nuevo coche eléctrico. A la inauguración de estas instalaciones acudieron todo tipo de autoridades, especialmente las correspondientes a la propia compañía, pero también miembros del gobierno de Italia.
Ferrari inaugura sus nuevas instalaciones de Maranello
Este nuevo edificio funcionará de forma totalmente sostenible. Sobre el tejado del mismo se han acoplado un total de 3.000 paneles solares con los que se obtendrán 1,3 MW de energía con los que se alimentará. Por otro lado, Ferrari canalizará el agua de lluvia para ser reutilizada en los diferentes procesos en los que se necesite este elemento. Con ello esperan ahorrar un 60% en la necesidad de obtención.
Durante el evento, Benedetto Vigna, CEO de Ferrari, tuvo a bien pronunciar algunas palabras al respecto: “Este edificio nos permitirá acortar el tiempo de comercialización o desarrollo de productos”. Durante su intervención, el directivo dejó claro que la firma no estaba preocupada especialmente por el volumen de fabricación, sino por el propio valor unido a sus vehículos eléctricos de próxima generación. “Queremos hacer crecer a la empresa, pero no lo haremos aumentando los volúmenes de ventas”.
Ferrari seguirá siendo una compañía exclusiva. Un buen ejemplo de ello es el propio precio con el que contará el primer eléctrico de la marca. No obstante, el mayor potencial que esperan alcanzar para aumentar los beneficios está unido a la personalización de sus modelos: “Queremos tener más herramientas. Herramientas tecnológicas… Más flexibilidad para dar cabida a la necesidad de una mayor personalización de nuestros clientes”, aseguró el directivo.
Este nuevo edificio cuenta con una superficie de 42.500 metros cuadrados, los cuales se suman a las instalaciones ya existentes en el pueblo italiano. Ahora, en total, Ferrari será capaz de producir hasta 20.000 vehículos al año, frente a los 14.000 que pudo ensamblar el pasado 2023.
Pero dentro de sus nuevas instalaciones no sólo se ensamblará su coche eléctrico, sino también los componentes internos clave para los vehículos híbridos y eléctricos de la compañía, como motores, ejes, elementos de baterías o los sistemas electrónicos de estos.
Sin embargo, una vez la producción del primer coche eléctrico esté asentada, Ferrari utilizará estas dependencias también para la fabricación de sus coches híbridos y de combustión, ya que creen que la llamada ‘multi opción’ mecánica es la verdadera solución de cara al futuro próximo. “Creemos que no existe una solución única para los futuros sistemas de propulsión de automóviles. Nuestra estrategia es seguir invirtiendo en los tres tipos”, afirmó Vigna.