La industria europea de componentes para coches eléctricos ha sufrido una verdadera debacle durante el pasado 2024.
A finales del año pasado ya se contabilizaban cerca de 50.000 propuestas de despido que los principales proveedores europeos -como Robert Bosch, Continental o Valeo- anunciaron durante 2024 de cara a llevarlos a cabo entre los dos y los próximos cinco años.
54.000 despidos, un 10% más de los previstos
Pero finalmente, y una vez finalizado el año, la falta de demanda de coches eléctricos respecto a la prevista por los distintos fabricantes ha hecho que la cifra de despidos anunciada por los proveedores crezca en cerca de un 10%, hasta los 54.000.
Así ocurrirá en compañías como Bosch, que recortará hasta 5.500 puestos de trabajo, pero también con ZF, que despedirá a 12.000 de sus empleados en Alemania, o también con Continental, que despedirá a 7.150 empleados en todo el mundo a finales de este 2025.
Desde CLEPA, la patronal europea de proveedores, señalan que los 54.000 despidos previstos en una cifra superior incluso a los despidos que esta industria llevo a cabo sumando los ejercicios de 2020 y 2021.
Las causas de esta crisis de la industria europea: los coches eléctricos, en el epicentro
Según ha explicado CLEPA en un comunicado, “el aumento de coste de la energía y de la producción” han debilitado la demanda de componentes por parte de los fabricantes, quienes a su vez se están viendo muy afectados por la falta de demanda de coches eléctricos en Europa.
Y es que si, de media, en Europa, la cuota de penetración de los coches eléctricos es del 14%, se calcula que los fabricantes europeos deberían vender un 20% para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones de la norma CAFE. Ahora bien, muchos fabricantes, como Mercedes, Porsche o Volkswagen están viendo como las ventas de sus coches eléctricos no dejan de disminuir y son sólo algunos pocos, como el Grupo Renault, los que las incrementan.
CLEPA es consciente de lo anterior, y explica que, por ejemplo, la producción de coches eléctricos y térmicos en Europa ha descendido un 20% desde la pandemia y, en 2024, en 700.000 vehículos anuales frente a 2023. Además, desde esta organización recuerdan que las inversiones relacionadas con los coches eléctricos descendieron en 2024 hasta a 564.000 millones de euros; “la cifra más baja desde 2019”.
La patronal europea también señala que “a menos que la demanda de coches se recupere y Europa recupere a su vez la competitividad, la ola de pérdidas de puestos de trabajo continuará hasta bien entrados los próximos años”.
Buenas previsiones para 2025, pero desconfianza en el mercado europeo
Sin embargo, las perspectivas parecen mejorar de cara a este año, donde estudios de consultoras como GlobalData citados por Autonews señalan que los coches eléctricos y los híbridos enchufables supondrán hasta el 27% de la producción mundial de vehículos, frente al 20% de 2024.
Pero los proveedores de componentes para automóviles en Europa siguen siendo cautos. Así, hasta dos tercios de los socios de CLEPA consideran que la cuota de mercado de los coches eléctricos -recordemos, ahora, de un 14%- no alcanzará el 50% en 2030.