El vehículo eléctrico es el único sistema de propulsión rodada capaz de interactuar con la red eléctrica, proporcionando flexibilidad al sistema, equilibrando la curva de demanda, impulsando las redes inteligentes y promoviendo la introducción de las energías renovables, aseguró Arturo Pérez de Lucia, Director General de AEDIVE, en una jornada sobre el reto de la generación distribuida y la integración de las energías renovables organizada por la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE)
Por su parte, Mariano González Sáez, Viceconsejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad de la Comunidad de Madrid, señaló que “el vehículo eléctrico es mucho más que movilidad sostenible; es un eje de eficiencia energética en el impulso de las energías renovables, la generación distribuida, el almacenamiento energético y el autoconsumo, en un mundo que reclama cada vez más electricidad no contaminante y seguridad en el suministro”.
Asimismo, Alicia Carrasco, directora ejecutiva de la Asociación Entra Agregación y Flexibilidad, puso de relieve el papel de una nueva figura clave del sector eléctrico como el agregador de demanda, que podrá aprovechar las capacidades del vehículo eléctrico no solo para tomar electricidad de la red, sino también para entregarla, utilizando la batería embarcada como un sistema de almacenamiento distribuido de energía.
Pedro González, director de regulación de AELEC, Asociación de empresas de energía eléctrica, destacó en su intervención el papel a jugar por parte de las empresas distribuidoras para lograr cubrir aquellos espacios que no cubra la iniciativa privada para completar un mallado de puntos de recarga rápida en todo el territorio español, al tiempo que señaló que es imprescindible una red suficiente de recarga en vía pública, así como en analizar propuestas que hagan viable su desarrollo.
Aitor Amezua, en representación de AFBEL, Asociación de Fabricantes de Bienes de Equipo Eléctricos de Media y Alta Tensión, señaló la importancia de las redes inteligentes para lograr que la interlocución entre el vehículo eléctrico y la red eléctrica tenga sentido, a través de la gestión de los desequilibrios entre generación y consumo y para garantizar un uso sostenible e inteligente de los recursos, fomentando la transición energética.
Finalmente, Jose María González, Director General de la APPA, Asociación de Productores de Energías Renovables, destacó las sinergias entre la producción de electricidad renovable y el vehículo eléctrico para lograr una descarbonización total del transporte e Ignacio Guerrero, de la firma Ampere-Energy, destacó la llegada de soluciones industriales para impulsar un nuevo modelo energético más eficiente y sostenible, basado en el autoconsumo, el almacenamiento y la gestión inteligente de la energía y que otorgue un mayor poder al consumidor, donde destaca la capacidad de interlocución de estas soluciones con el vehículo eléctrico, cuyas baterías, además, tienen una doble utilidad en la automoción, embarcadas en el propio vehículo durante toda su vida útil, pero también fuera del vehículo en una segunda vida para sistemas estacionarios de almacenamiento de electricidad procedente de fuentes renovables.