Uno de los lanzamientos más esperados de la década lo protagoniza la resurección del Renault 5. Llegará de nuevo al mercado en forma de coche eléctrico haciendo uso de la última tecnología de Renault a cambio de un precio que lo debería situar como una alternativa asquible respecto al resto de modelos del segmento B. Pasados dos años de su presentación, esto es lo que sabemos hasta ahora sobre él.
El Renault 5 original fue producido entre 1972 y 1996. En su renacimiento eléctrico será un vehículo compacto de cinco puertas con un diseño inspirado en el modelo original, pero con un estilo más moderno y futurista. Su llegada está prevista para 2024 como un coche eléctrico asequible que acapare el mercado de volumen que ronda los 20.00-25.000 euros y que, por ahora, no está cubierto por la oferta.
Desarrollo ‘fugaz’
La industria del automóvil vive atada a los largos plazos de desarrollo para la llegada de nuevos modelos. Una de las ambiciones del plan Renaulution era la mejora en los tiempos de lanzamiento de los nuevos vehículos. Una organización más eficiente y una optimización de la tecnología, para facilitar su adaptación a diferentes modelos, aceleraría el desarrollo. El objetivo marcado por Luca de Meo era reducir este tiempo de cuatro a tres años.
Por eso, en aquel momento sorprendió que con la presentación del primer prototipo ya se anunciase la fecha de inicio de producción, principios de 2024. El CEO había dado luz verde al proyecto unos meses antes y el concept se desarrolló rápidamente para la presentación de enero de 2021. Un prototipo que prácticamente sería, en un 90%, el que llegaría a producción, lo que tuvo un importante efecto mediático.
La espera se hace larga
En estos dos años, el fabricante ha ido ofreciendo algunas informaciones del proceso de desarrollo. Se supo que solo habría versiones eléctricas, que su precio estaría contenido alrededor de los 20.000 € gracias al uso de baterías LFP, que su diseño sería casi idéntico al prototipo e, incluso, se habló de su fecha de llegada al mercado.
Crear un producto con tan altas expectativas y tan aparentemente real hace que al público se le haga la espera un poco larga, ya que lleva dos años preguntándose cuándo llegará el R5 eléctrico. El proyecto sigue su curso y se espera que Renault sea capaz de cumplir con los plazos. La apertura de pedidos podría realizarse a principios de 2024 y las entregas hacerse realidad un poco más avanzado el año.
Este R5 se encargará de inaugurar una plataforma eléctrica, la CMF-BEV, para la que no ha partido de cero, sino que se ha basado en una adaptación de la del Clio, lo que debe permitir reducir el precio de venta, ya que aquí hay un importante ahorro en I+D para el fabricante. En septiembre del año pasado, se vio un Renault 5 camuflado de Clio haciendo pruebas, en España, de su tren de potencia eléctrico.
Probando el R5 eléctrico
La revista AutoExpress tuvo la oportunidad de ponerse al volante de esta mula de pruebas, advirtiendo que el R5 promete ser más dinámico y divertido de conducir que el Zoe gracias a unas vías más anchas, una dirección muy receptiva, una suspensión trasera multibrazo que brinda una gran estabilidad y un nuevo sistema de frenos desarrollado con Continental.
A pesar de esta exposición pública del desarrollo del coche, pocos son los datos que se han filtrado de su ficha técnica. El R5 debería estar disponible en dos variantes que se diferencian tanto en el motor como en la batería. La versión de acceso estaría dotada de una batería LFP que permita un precio de venta por debajo de los 20.000 €, una condición que peligra por la subida de los precios de los suministros en los dos últimos años y que podría hacer que la barrera económica subiera hasta los 25.000 €. La versión tope de gama dispondría de una batería ternaria NCM con 400 km de autonomía, un valor similar al que ofrece el veterano Zoe, que es más que suficiente para un coche que, sobre todo, se moverá por la ciudad.
El siguiente paso que se espera es la puesta de largo de los primeros prototipos con la silueta final de producción, que debería ser cuestión de semanas. Aunque el fabricante no ha cerrado la fecha oficial, se espera que sea durante la segunda mitad de 2023. El Salón del Automóvil de Múnich que se celebra en septiembre podría ser una gran oportunidad para conocer casi todos sus detalles, incluido el nombre, que, por ahora, también es completamente desconocido.
¿Es este el interior?
Sin embargo, dada la importancia que tiene para Renault este modelo, es de esperar una larga campaña de pequeñas píldoras para crear toda la expectación posible. Precisamente, parte de esta campaña de marketing puede haber comenzado ya con la revelación de los bocetos del posible interior del Renault 5 por parte de la revista francesa Automobile-Magazine.
https://t.co/9IbArEkZbY
— L'Automobile Magazine (@LAutomobileMag) March 10, 2023
Double dalle en "L" ou pas ? Esprit vintage ou pas ? Comment sera l’habitacle de la future #Renault 5 #électrique ? Eléments de réponse.
Porque precisamente es el habitáculo una de las incógnitas que el fabricante se ha guardado en secreto durante todo este tiempo. Los bocetos que se muestran ahora dejan ver que el R5 no dispondrá del salpicadero con dos pantallas en ‘L’, que quedan reservadas para los modelos superiores. En su defecto, será una doble pantalla horizontal, ligeramente curvada y sin carcasas, para evitar reflejos, la que mantendrá informados y entretenidos a los ocupantes del coche.