Renault es una de las empresas con mayor experiencia en el campo de los coches eléctricos. El Renault ZOE ha sido durante años uno de los eléctricos más vendidos. Sin embargo, el panorama actual y futuro obliga a la marca francesa a pisar el acelerador en la electrificación de la gama. Tal es así que Renault modificará la planta de Douai para la fabricación del nuevo Renault Mégane E-TECH y los futuros modelos que vayan surgiendo.
Hace apenas unas semanas, Renault realizaba el lanzamiento informativo del nuevo Mégane E-TECH, la versión 100% eléctrica del compacto francés. Con un diseño y unas características radicalmente diferentes al modelo de combustión, supone un reto a la hora de fabricarlo, ya que implica la adaptación de las líneas de montaje, los procesos e incluso las herramientas necesarias.
Por ese motivo, Renault ya está realizando los cambios necesarios en su planta de Douai, en Francia, que es donde será fabricado el Mégane E-TECH. El objetivo es actualizar y modernizar las líneas de producción no solo para el compacto, también para futuros modelos eléctricos que vayan llegando al mercado, que serán unos cuantos durante los próximos años, tal y como está marcado en los planes estratégicos de la marca.
Robot trabajando en la factoría de Douai.
El Mégane E-TECH solo ha sido la punta de lanza de esta nueva estrategia eléctrica. Aunque el ZOE es el primer eléctrico de Renault, junto con el particular Twizy, el compacto eléctrico representa el punto de partida de la nueva hornada de productos. En los próximos años llegarán nuevas unidades como el Renault 5 Electric, cuyo lanzamiento está previsto para el 2024, y que también será fabricado en la planta del norte de Francia.
Un componente fundamental de esta nueva estrategia son las baterías. Las instalaciones de Douai contarán con una inmensa fábrica donde serán producidas y ensambladas las baterías de los próximos coches eléctricos de Renault tras un acuerdo finalizado con el Envision AESC. Dicha "gigafactoría" contará con una capacidad de 9 GWh para 2024 y de 43 GWh para el 2030.
La inversión para levantar todas las instalaciones tiene un coste presupuestado de 2.000 millones de euros. Las pilas allí fabricadas serán distribuidas para todas las marcas de la alianza del Grupo Renault: Renault-Nissan-Mitsubishi. En total se espera poder fabricar en torno a los 400.000 vehículos a partir del año 2025. De llegar a semejantes ritmos de producción, el centro de Douai, al que Renault ha nombrado como ElectriCity, se convertirá en el mayor centro de producción de movilidad eléctrica de Europa.