Renault anunció para su compacto más popular un cambio de filosofía sin precedentes, pues la próxima generación del Renault Mégane sólo estará disponible exclusivamente bajo la oferta de motorizaciones puramente eléctricas, además de llegar en formato SUV. Horas atrás la firma francesa ha dejado ver las primeras imágenes de su coche eléctrico en su forma final de producción, aunque eso sí, camuflado.
Semanas atrás la marca del rombo dio a conocer los primeros detalles e imágenes del relevo generacional del Renault Mégane, en el que además de alguna fotografía de su interior, también nos dejó ver su zaga, y aunque mostrasen más bien poco, sí que dejaban claro que el modelo conceptual cambiaría muy poco su morfología antes de convertirse en un modelo de producción en serie.
Las fotografías que ha publicado Renault acaba de confirmar esto mismo, pues aunque su carrocería esté cubierta con un vinilo que juega con el logo de la compañía para intentar ocultar sus formas en cierta manera, la verdad es que las proporciones muestran un coche eléctrico que apenas difieren de las del prototipo que conocimos en octubre del pasado año.
Renault Mégane eléctrico camuflado.
Una carrocería sobreelevada, pasos de rueda y taloneras con protecciones y un alto capó son los atributos a los que recurre para acercarse al segmento que conforman los SUV compactos, si bien es cierto que en términos generales y a pesar de que no disponemos de las medidas oficiales, las proporciones sugieren que seguirá tratándose de un coche compacto en lo que a tamaño se refiere.
En la zaga llama la atención que la chapa gana terreno a la superficie acristalada y faros, aun estando estos últimos unidos por una franja potencialmente de led. Domina la estampa el portón del maletero, apostado de manera totalmente vertical, y en el que apenas gana sitio una luneta trasera de pequeño tamaño.
Una inscripción en el vinilo de esta unidad de preserie camuflada adelanta que equipa un motor eléctrico de 160 kW (217 CV) de potencia apostado en el eje delantero y que se alimenta de un paquete de baterías de 60 kWh de capacidad, tal y como adelantó Renault cuando presentó al Mégane eVISION conceptual. Con ello la autonomía total con una carga completa de su batería debería rondar los 450 kilómetros.
El Renault Mégane eléctrico tendrá un motor de 160 kW de potencia y una batería de iones de litio de 60 kWh.
Dice Renault que esta es una de las 30 unidades que existen y que están destinadas a servir a la firma como coches de prueba en la fase final de desarrollo antes de dar por concluida la parte técnica de su SUV compacto eléctrico.
Es de esperar que la firma francesa revele el diseño final este mismo ejercicio, probablemente en algún punto cercano al final del mismo, con la comercialización dando comienzo el próximo año, si la falta de abastecimiento de semiconductores lo permite, claro. Recordemos que Nissan ha tenido que posponer el lanzamiento del Nissan Ariya, un SUV eléctrico articulado en torno a la misma plataforma que el próximo Renault Mégane, la CMF fruto de la colaboración entre Renault, Nissan y Mitsubishi.
