La industria del automóvil vive un momento de cambios importantes, y aquellos fabricantes que consigan adaptarse y ponerse al día de las tendencias lograrán sobrevivir con éxito. Renault ya mira hacia lo que será su futuro buque insignia a medio plazo.
Hablamos de un vehículo de carrocería y batalla larga, estilo shooting brake, y que el director de diseño del Grupo Renault, Laurens van den Acker, ha asegurado que marcará el futuro de la firma. En sus declaraciones al medio Auto Express, el responsable sentencia que “es la proporción del futuro”, pues es algo “más bajo que un SUV, pero un poco más alto que una berlina”.
Será el Renault más grande
Lo inteligente en todo esto, dice Laurens, es que podrán seducir a los conductores “con algo completamente nuevo”, lo que tiene mucho más atractivo que si se recurre a algo muy extendido en el sector.
La inspiración la hemos conocido ya, pues el Renault Emblème se estrenó en forma de prototipo hace apenas unos meses. Un trabajo que dará lugar al modelo más grande de la marca francesa, pues incluso supera al Renault Espace de siete plazas.
Recordemos que el concepto planteado mide 4,8 metros de largo, para una batalla de 2,9 metros, una distancia entre ejes que copia la de un modelo tan popular como el BMW Serie 5.
Un automóvil de este tipo podría ser viable con la plataforma AmPR Medium de nueva generación, aunque todavía no se ha confirmado si recurrirá a un sistema de propulsión eléctrico de autonomía extendida, o si por el contrario será 100% eléctrico y prescindirá de motor alguno de combustión.
El sistema de propulsión dependerá de las evoluciones disponibles
Lo que no parece que salga adelante es la propuesta mecánica del prototipo Renault Emblème, en el que presentaron una tecnología con motor eléctrico de 215 CV de potencia en posición trasera y alimentado por un paquete de baterías de 40 kWh que se puede recargar mediante enchufe o haciendo uso del sistema de pila de pila de combustible de hidrógeno que incorpora.
Con eso, la marca francesa prometió una autonomía de 1.000 kilómetros, pero Van de Acker asegura que cualquier tipo de hibridación, para permitir una autonomía extendida gracias a un depósito y a un generador alimentados por gasolina comprometería el espacio, aunque necesitan avances en paquetes de baterías para que no sea el peso lo que juegue en contra del conjunto.
Como no se espera que el buque insignia inspirado en el Renault Emblème llegue hasta al menos 2028, todavía hay tiempo para evolucionar las baterías, que ahora son de NMC, pero pronto también llegarán a la gama los componentes hechos a base de LFP y de origen europeo.
Llegado el momento, veremos por lo que se deciden, y la autonomía final que pueden homologar. También se podrá comprobar si se convierte en el nuevo automóvil de tracción trasera que se incorpora a la producción (actualmente no hay ninguno así) o si finalmente se recurre a tracción delantera o total.