El Grupo Renault está celebrando estos días sus particular congreso del coche eléctrico, que llama días EWAYS, y en la que han dado a conocer dos nuevos coches eléctricos que acabarán siendo comercializados en Europa. El primero de ellos ha sido el Dacia Spring, el primer eléctrico de la firma rumana que promete ser el coche eléctrico más asequible en el viejo continente. El segundo es el protagonista de este artículo, el Renault Mégane eVISION, un coche eléctrico conceptual que adelanta las formas de un nuevo SUV eléctrico.
En contra de los que todos los medios apuntábamos con la revelación del primer teaser de este coche eléctrico, ese concept no sólo adelanta las formas de un SUV que se dispondrá de manera paralela a la gama eléctrica del fabricante francés, sino que también sustituirá, o al menos tomará el nombre,del que tal vez sea el modelo más exitoso de Renault en los últimos años, el Renault Mégane.
Así pues, los franceses han revelado al público este atractivo modelo conceptual que tal y como apuntaban lo comentado por una fuente cercana al propio Luca de Meo, CEO de la marca francesa, este será el SUV que tome el nombre del compacto francés, dejando atrás la carrocería compacta para ser un SUV eléctrico.
Se basará en la plataforma desarrollada entre la alianza que confirman el propio Grupo Renault con Mitsubishi y Nissan, por lo que está directamente hermanado con el Nissan Ariya eléctrico presentado meses atrás. Hablamos de la plataforma modular CMF-EV, que permitirá, tanto al futuro Mégane eléctrico como a otros modelos, portar tres paquetes de baterías distintos en versiones de 40 kWh, 60 kWh y 87 kWh, con un sistema eléctrico de 400 V.
El uso de esta plataforma, según palabras de la propia Renault, ha podido llevar a los encargados del proyecto a aprovechar al máximo el espacio del que disponen a pesar de los 4,21 metros de longitud total, ya que las ruedas han podido ser llevadas hasta las mismas esquinas de la carrocería, dejando tras de sí una distancia entre ejes de 2,77 metros y unos voladizos realmente cortos.
Además, en pro de aumentar más aún el espacio a bordo, han conseguido agrupar todo el compendio técnico en el frontal del coche, dejando tan sólo espacio para el esquema de suspensión en la parte trasera y bajo el piso del habitáculo para el paquete de baterías, que forma parte de la propia estructura del coche y que dicen los franceses gozará de un grosor inédito.
Esta plataforma permitirá al Mégane contar con opciones de tracción total y tracción delantera, mediante la adición de un motor más en el eje trasero, lo que también aumentaría la potencia que en se ha revelado para la versión de tracción delantera, de 160 kW (217 CV) y 300 Nm, aunque aún es pronto para dilucidar sobre este aspecto, y además Renault no ha comentado nada más sobre ello.
Es de esperar que el modelo de serie que se derivará del este modelo conceptual herede rasgos clave en en su camino a producción, y según Renault se presentará en 2021. Elementos como los cortos voladizos, la alargada línea del techo y el abultado capó es probable que se mantengan, así como la estética de los grupos ópticos y un interior más mundano.
