El fabricante NIO se presenta como una de las más serias alternativas automovilísticas chinas en el mercado europeo en los próximos años. Sus modelos, de precio competitivo, se posicionan como duros contrincantes para las marcas históricamente asentadas en el Viejo Continente. En unas recientes declaraciones, el fundador de la compañía cree que la rentabilidad en Europa está garantizada y espera tener éxito allá donde sus rivales directos han encontrado un mayor número de problemas.
El primer modelo de NIO que desembarcará en Europa será el sedán eléctrico ET7, el cual se espera que inicie sus primeras entregas en los próximos días. Posteriormente llegará el ET5, un sedán de tamaño algo más pequeño, y posteriormente hará lo propio el EL7, un SUV eléctrico de gran tamaño, el cual se espera para comienzos del próximo 2023. Es por ello que, con tres modelos eléctricos en circulación, NIO aspira a convertirse rápidamente en toda una alternativa para los conductores y usuarios europeos. Además contará con su particular método para intercambiar unas baterías totalmente cargadas.
NIO posee una de las mayores innovaciones en cuanto a “recarga” de coches eléctricos. Y es que su conocido mecanismo no va de enchufar el vehículo y esperar a que este se recargue, sino de sustituir la batería por una totalmente cargada a través de sus estaciones de intercambio, de las cuales ya existen tres en Europa, la última inaugurada recientemente en Alemania. NIO planea construir 1.000 de estos puestos fuera de China para 2025, y la mayoría de ellos serían en Europa.
El propio fundador de NIO, William Li, ha expresado que en China existe una gran cantidad de fabricantes automovilísticos, aunque “con un producto real” son sólo “en torno a 20 o 30”, entre los que se incluyen Geely, SAIC o la propia NIO. El empresario oriental ve claros indicios de éxito en estas marcas sobre territorio europeo ya que la enorme oferta de firmas hacen mejorar sus respectivos productos. “Toda competencia es buena porque hace avanzar a la industria. Hay muchos grandes fabricantes en Europa. Incluso en China, Mercedes, BMW y Audi son competidores duros. Todavía tenemos un largo camino por recorrer para ser tan fuertes”, aseguró el directivo.
Li afirmó que si NIO ha podido sobrevivir y triunfar en China, tiene la oportunidad de ser competitivo en mercados como el europeo. El empresario ve a la industria automotriz como uno de los “mercados más abiertos” que existen.
En su visión empresarial, en el medio-largo plazo, Li tan sólo vislumbra un mercado compuesto en su práctica totalidad por coches eléctricos a batería, ya que piensa que los modelos con pila de combustible de hidrógeno no estarán a la altura. “El vehículo se está convirtiendo en un espacio de vida móvil, y eso solo funciona con un coche eléctrico”, afirmó.
Los pronósticos de William Li para Europa son esperanzadores, ya que vislumbra que NIO será una de las marcas con mayor satisfacción entre sus clientes en apenas tres años. En este aspecto, el responsable mira directamente a marcas como Tesla: “Vamos por buen camino hacia la rentabilidad. Tesla tardó 16 años. Nosotros no necesitaremos 16 años”.
Los planes de la compañía estipulan que NIO se convertirá en una marca convencional en Europa, al más puro estilo Volkswagen o Toyota, apenas unos meses después de su llegada. Esto es algo que ya está consiguiendo MG, por ejemplo, una firma que ha regresado al Viejo Continente con una nueva filosofía y un posicionamiento de marca muy particular que está dando muy buenos resultados.
