Hace poco conocíamos el caso de un cliente chino que, después de sufrir un accidente en su Polestar 2, el coste de reparación ascendía a 80.000 euros. El motivo: había que cambiar la batería, que estaba dañada. Un caso que ha traído cola y que ha acabado de la manera más lógica (para el bolsillo): con el coche en el desguace.
Pocos meses después de comprar el coche, nuestro protagonista tuvo un accidente, no demasiado aparatoso a primera vista pero con daños críticos para el vehículo -un Polestar 2-. A los desperfectos del paragolpes y el capó había que añadir una batería bastante dañada: la plancha de acero que la protege estaba perforada, lo cual compromete el funcionamiento y la seguridad de las celdas de la batería, así como la integridad del chasis.
El propietario del vehículo habló con el Centro Polestar que le había vendido el coche y le presupuestaron casi 80.000 euros para repararlo, incluyendo una sustitución de la batería completa. Un precio desorbitado y casi el doble de lo que cuesta el coche nuevo en China en la versión Long Range Dual Motor (unos 49.500 euros). Otro servicio técnico diferente le presupuestó 59.000 euros, una cantidad notablemente inferior pero igualmente desorbitada.
El coste de sustituir la batería y reparar el coche ha terminado inevitablemente con el coche en el desguace. Por suerte para el propietario, él no ha tenido que hacerse cargo de la reparación. Y a la compañía aseguradora le ha salido mucho más barato proporcionarle un coche idéntico nuevo que reparar el accidentado, así que el Polestar 2 accidentado ha terminado pasando a mejor vida, como suele decirse. No hay que hacer reparaciones.
El elevado coste de la sustitución de la batería del Polestar 2 está relacionado con la estructura de la misma, que tiene forma de H en dos capas en lugar de una estructura monobloque, un diseño más habitual. Esta estructura reduce el riesgo de que las baterías se dañen, pero a costa de un mayor coste de reparación -como ha quedado demostrado-. Un portavoz de Polestar dijo que la información de que la sustitución del paquete de baterías costaría cerca de 80.000 euros (540.000 RMB) era incorrecta, aunque no proporcionó más detalles.
Sea como fuere, la sustitución o reparación de las baterías en el servicio oficial es un problema recurrente. Un caso muy sonado el año pasado tenía como protagonista un Model 3, con una avería en la batería que el servicio técnico de Tesla cifró en 16.000 dólares pero que se podía arreglar por apenas 700. En la gran mayoría de casos, los servicios técnicos oficiales optan por la sustitución completa de la batería en lugar de reparar la parte dañada, incluso cuando esto último es perfectamente conveniente. Esto no debería ser un problema mientras la garantía esté en vigor, pero puede convertirse en una pesadilla para el cliente si le toca reparar (o sustituir) la batería fuera de garantía.