Fisker va revelando con cuentagotas las características que pasarán del prototipo del Ocean a la versión de producción que Magna comenzará a ensamblar el año que viene. Si bien por fuera parece que todo está bastante definido, el interior sigue todavía en fase de diseño. En un vídeo publicado en su canal de Youtube, Fisker presenta Revolve, una pantalla central de 17,1 pulgadas que implementará en el Ocean que tiene la virtud de girar 180 grados para elegir si se quiere en posición vertical o en posición horizontal.
Las pantallas del salpicadero se han convertido en un elemento común en todos los coches, sean eléctricos o de combustión. Pero no solo importa su tamaño, también tiene importancia su formato y sobre todo su disposición, vertical u horizontal. Aunque la tendencia más general es que esta pantalla ocupe cada vez más espacio en horizontal, incluso fusionándose con la de la instrumentación, todavía existen dos filosofías diferentes que defienden cual es formato más correcto para la conducción.
Tesla parecía tenerlo claro cuando colocó la enorme pantalla central de 17 pulgadas en posición vertical en el salpicadero del Model S. Pero luego cambió de opinión. En el Model 3 pasó no solo a ser horizontal, sino a ser la única que incluía el coche, es decir también es la de instrumentación que habitualmente se coloca tras el volante. El Ford Mustang Mach-E por ejemplo ha optado por una pantalla vertical de gran formato y Renault ha optado por una pantalla en forma de L que mezcla ambos conceptos en el nuevo Mégane E-Tech.
En teoría, una pantalla horizontal es más apropiada para ver los contenidos multimedia. Es el formato de las pantallas de los ordenadores portátiles, la mayoría de las tablets y por supuesto de los televisores. Una pantalla vertical se adapta mucho mejor a la navegación porque permite ver más tramo de carretera por delante y que la ruta sea más previsible. También es más fácil escribir en ellas y visualizar contenidos web. Por esa razón es el modo en el que habitualmente se utilizan los teléfonos móviles. En un coche, además, es necesario no situar información muy abajo en puesto que eso obliga al conductor a desviar demasiado la vista de la carretera para consultarla.
Fisker parece haber atendido las necesidades que defienden ambos bandos y ha decidido implementar una pantalla de 17,1 pulgadas en el salpicadero del Ocean que tiene la propiedad de girar 180 grados. En ella se integrará el sistema multimedia y el sistema de navegación y se situará en una u otra posición dependiendo de la función que tenga que cumplir en cada momento. Se trata de una solución que estaba ya presente en el prototipo y que finalmente pasará a la versión de producción.
Así, cuando el SUV eléctrico está rodando, la pantalla se situará en posición vertical para ofrecer diversos controles e información del vehículo, y facilitar la navegación. Cuando el vehículo se encuentre estacionado se activará el modo Hollywood, situando la pantalla en posición horizontal para permitir la visualización del contenido multimedia.
Esta función no estará disponible en todos los Fisker Ocean, sino que se convertirá en una opción que tan solo estará presente en la parte alta de la gama. Los dos acabados de entrada, Sport y Ultra no lo ofrecerán. Son precisamente las versiones correspondientes los acabados más altos las primeras que fabricará Magna Steyr para Fisker en sus instalaciones de Austria.