Rivian no atraviesa su mejor momento. La compañía de RJ Scaringe sigue perdiendo valor en los mercados. Mientras que sus acciones caen rápidamente, se produce la primera llamada a revisión. Un momento que ningún fabricante quiere vivir, pero que siempre acaba pasando. Rivian acaba de anunciar que 500 unidades de su pick-up, el Rivian R1T, tendrán que pasar por el taller para corregir un potencial riesgo relacionado con el airbag del acompañante.
Como decimos, es un trance por el que ninguna marca quiere pasar. Tras unos test, los californianos han detectado un problema en el airbag del copiloto en un puñado de unidades. 500 vehículos no son muchos, pero si tenemos en cuenta los volúmenes de producción de Rivian, la llamada a revisión es mucho más delicada de lo habitual. No sólo por el volumen de vehículos, sino también por la situación que vive la compañía a nivel financiero.
La NHTSA, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras, ha sido la encargada de emitir el aviso de peligro. La compañía ha descubierto que algunos asientos de su pick-up tienen un defecto por el cual no desactivan el despliegue del airbag al detectar una silla para niños. Como ya sabrás, cuando un sistema de retención infantil se fija en el asiento del copiloto el airbag debe ser desactivado para evitar lesiones en el niño.
Catalogado como un riesgo de seguridad, Rivian ha determinado un total de 502 unidades del Rivian R1T fabricadas entre el inicio del periodo de producción del año pasado y el 12 de abril de este mismo año. Los conductores afectados por el problema serán correspondientemente avisados para llevar sus coches al taller para así poder subsanar el sensor que detecta la silla infantil. Rivian correrá con cualquier gasto derivado, y se espera que la reparación no lleve más de unas pocas horas, pues tan sólo se reemplazará el asiento defectuoso por uno que no lo esté.
Las acciones siguen cayendo
No es ninguna novedad el hecho de decir que Rivian está en un momento financieramente delicado. En los últimos días uno de sus socios, Ford, se ha deshecho de otro importante paquete de acciones. Los del óvalo han sacado a la venta un total de 7 millones de títulos por un valor de 188,42 millones de dólares. Esto ocurre unos pocos días después de que Blue Oval, dependiente de la propia Ford, vendiera 214 millones de dólares en acciones. En una semana el fabricante ha vendido más de 400 millones de dólares en acciones.
Todo parece indicar que los de Michigan se han cansado de Rivian. Tras haber invertido grandes cantidades de dinero en el Startup de RJ Scaringe, Ford ha perdido casi 3.000 millones de dólares por la pérdida del valor de las acciones. En su momento más álgido, Rivian llegó a cotizar a 172 dólares por título, mientras que en la actualidad la cotización ronda los 27 dólares. Una situación muy delicada a la que se tendrá que buscar una salida, y en la que la primera llamada a revisión de la marca no ayudará en absoluto.