Las últimas semanas están siendo de lo más intensas para Rivian. El fabricante americano vive en una burbuja desde hace meses. La entrada en producción de sus dos primeros productos ha resultado en las primeras entregas antes de concluir el año. Los pacientes conductores ya disfrutan de sus modelos eléctricos, aunque ahora se anuncia que hasta 2023 no se realizarán las entregas de las versiones con los formatos de batería más grandes de todos.
RJ Scaringe, el CEO de Rivian se ha encargado de comunicárselo a los clientes mediante un correo electrónico. Gracias a los últimos acontecimientos, las reservas se han disparado. En la actualidad son 71.000 los pedidos que la compañía tiene sobre la mesa. La mayoría de ellos, el 80%, tal y como comunica Rivian, se centran en las versiones con la batería más pequeña de todas, así que estos no se verán afectados por los nuevos retrasos en las entregas.
Como es lógico, Rivian quiere centrarse en realizar el mayor volumen de entregas posibles, y eso hace que los pedidos minoritarios se vean pospuestos. Las versiones más comerciales del Rivian R1T y Rivian R1S cuentan con un paquete de baterías lo suficientemente grande como para homologar autonomías de 505 y 508 kilómetros respectivamente. Un rango muy respetable teniendo en cuenta el peso y las capacidades de ambos vehículos.
Sin embargo, si entramos en el configurador de Rivian vemos que tanto la pick-up como el SUV están disponibles con un paquete de baterías superior que anuncia autonomías por encima de las 400 millas, más de 640 kilómetros. Tienen un coste de 10.000 dólares más, y por el momento, aunque se puedan reservar, no se van a entregar pues, como ya hemos dicho, la compañía quiere entregar las unidades de acceso primero.
Como parte del comunicado emitido por RJ Scaringe: "Con el fin de atender a la mayor cantidad de titulares de pedidos anticipados, daremos prioridad a la construcción del modelos Adventure con batería de paquete grande durante el próximo año. Los pedidos anticipados con paquete Explore y configuración de batería de paquete máximo seguirán en 2023. Al establecer nuestro tiempo de entrega, optimizamos nuestra secuencia de construcción en torno a la combinación de construcción que nos ayudaría a acelerar lo más rápido posible y, por lo tanto, tener el mayor impacto climático positivo posible".
Esta pequeña incidencia en los plazos de entrega no ha satisfecho a los mercados, los cuales han respondido con una ligera reducción en las cotizaciones de la compañía. Al cierre del día de ayer, Rivian se había dejado un 3,9% de su valor, cotizando cada acción a 102,87 dólares. Tampoco hay que volverse loco, pues se trata de un retraso "razonable" para tratarse de un fabricante tan primerizo. Los planes de expansión siguen en marcha, y los primeros clientes ya están disfrutando de sus esperados vehículos eléctricos.