Dada la situación de los mercados y el rápido cambio que está sufriendo la industria, emprender la batalla de la movilidad eléctrica en solitario es casi imposible o al menos muy costosa. Muchas marcas buscan asociarse entre sí para facilitar el proceso y reducir gastos. Por todo el mundo vemos acuerdos importantes, pero no todos triunfan. Hoy estamos ante uno que no ha cumplido con lo prometido. Honda y General Motors han anunciado que se separan. Su estrategia de fabricar coches eléctricos baratos y compartidos no sigue adelante. Cada una tendrá que continuar el camino por separado.
En la primavera del año pasado, ambas compañías anunciaron un gran e importante acuerdo transoceánico. Japón y Estados Unidos trabajando codo con codo para desarrollar coches eléctricos baratos. El reto era complicado, pero lo que parecía prometedor ha terminado convirtiéndose en un acuerdo inservible. Ambas partes han llegado a la conclusión de que lo mejor es separarse. El comunicado oficial de Honda siembra más dudas que certezas: "Después de realizar algunas investigaciones y análisis, ambas partes decidieron poner fin al desarrollo".
Honda se queda sola y sin eléctricos, pero la situación de GM no es mucho mejor
Los planes iniciales contemplaban el uso y desarrollo de sistemas compartidos para la fabricación de una nueva generación de coches eléctricos y asequibles. Hay que decir que GM y Honda llevan años trabajando estrechamente. En el pasado sellaron un acuerdo similar para la fabricación de baterías. En 2021, un año antes del acuerdo final, General Motors anunció que fabricaría dos coches eléctricos para Honda a partir de este mismo año, pero finalmente no ha sido así y puede que este sea uno de los motivos que ha desencadenado el triste final para esta alianza. GM también ha anunciado el cese de colaboración durante la reunión informativa relativa a sus resultados del tercer trimestre.
El objetivo era fabricar coches eléctricos apoyados en las baterías Ultium de General Motors. Sin embargo, a tenor de los últimos resultados de ventas confirmados por la compañía, los americanos están sufriendo mucho más de lo esperado para alcanzar los objetivos eléctricos que se habían propuesto. Mary Barra, la CEO de la compañía, ha sido la encargada de dar detalles específicos y, lo que es peor, de retrasar muchos de los planes que ya estaban sobre la mesa. Los 400.000 coches eléctricos programados entre el 2022 y el 2024 no se van a conseguir. De forma paralela, también se ha pospuesto la llegada de muchos modelos al mercado, como el esperado Chevrolet Equinox EV.
No cabe duda que Honda sale bastante perjudicada de este acuerdo fallido. Los japoneses se ven ahora sólos ante una escala eléctrica que puede obligar a retrasar sus planes. Toshihiro Mibe, presidente y director ejecutivo de Honda, todavía no ha comentado nada al respecto salvo las declaraciones ya publicadas. En estos momentos, la marca japonesa está introduciendo en nuestro mercado el Honda e:Ny1, aunque los planes para los años venideros estaban fuertemente influenciados por el acuerdo con sus socios americanos. Ahora mismo, todo parece en vilo.