Según las informaciones de la prensa coreana, Samsung SDI, la filial de la empresa tecnológica dedicada al desarrollo y producción de baterías, está preparando una nueva línea de producción de celdas de baterías 4680. El fabricante coreano se convertiría así en el tercer suministrador de baterías para los coches eléctricos de Tesla, junto a su compatriota LG Energy Solutions y a la japonesa Panasonic, que, por ahora, parece la más adelantada de las tres ya que se espera que arranque la producción el próximo año.
En la información publicada por el medio coreano TheElec, se asegura que la empresa coreana está preparando esta nueva línea de producción en sus instalaciones de la planta de Cheonan, en Corea del Sur. "Las celdas se corresponden con el formato cilíndrico 4680 (46 mm de diámetro, 80 mm de longitud)", afirma este medio que indica que el fabricante de baterías "verificará la tecnología dentro de un año". Esta misma publicación también afirma que Samsung SDI está ensayando la producción de una celda de baterías similar a esta, aunque un poco más corta, con destino al fabricante alemán BMW.
Inicialmente, la nueva línea de producción tendrá capacidad para fabricar 1 GWh de celdas anuales. Cuando los procesos y la tecnología estén verificados esta cifra aumentará significativamente, ya que Tesla ha señalado que adquirirá todas las celdas de batería de este formato que estén disponibles en el mercado para poder atender la gran demanda que prevé de sus coches eléctricos.
Si bien la firma californiana está fabricando estas celdas internamente en su línea piloto de Fremont, tiene una capacidad de producción limitada por las propias instalaciones y por su escasa experiencia en la producción de este componente. Hasta ahora Tesla se ha limitado a empaquetar en sus fábricas las celdas que Panasonic producía en la Gigafactoría de Nevada y posteriormente las que ha adquirido a proveedores como LG o CATL.
La estrategia de Tesla es confiar en su producción interna apoyándose en el suministro de las empresas especialistas en la producción de celdas de baterías. Elon Musk ya ha anunciado que en el futuro cada vehículo eléctrico contará con las baterías que mejor se adapten a sus necesidades. Por lo tanto utilizará tecnologías diferentes como químicas basadas en hierro (LFP) como químicas ternarias (NCM y NCMA).
Samsung se une así a Panasonic y LG Energy Solutions en la carrera por lograr un contrato de alto volumen con Tesla. La japonesa tiene previsto iniciar la producción el año que viene, lo que la convertirá en el primer suministrador externo que lo logra. La segunda ha invertido recientemente 450 millones de dólares para producir las celdas en su planta de Ochang.
A falta de la confirmación oficial por parte de Samsung SDI, el cronograma de trabajo todavía no está claro, aunque el medio coreano indica que una vez que se establezca la producción piloto en Corea, es probable que la compañía comience a producir la nueva celda en Seremban, Malasia, con una capacidad anual de entre 8 y 12 GWh. La compañía está solicitando ofertas para realizar un pedido de equipos de fabricación similares a los de Tesla para la producción de las celdas de la batería.