La unión del grupo automovilístico italoamericano FCA con el francés PSA, con Stellantis como resultado, dará lugar a que modelos que hasta ahora conocíamos y que fabricaban de manera independiente compartan ingeniería, así como, probablemente, productos completamente nuevos, entre los que potencialmente se comercializará una serie de coches eléctricos de corte urbano y asequible.
Ahora gracias a unas renderizaciones de un artista independiente podemos ilustrar lo que sabemos hasta ahora sobre el relevo de los Peugeot 108 y Citroën C1, así como las iteraciones de Opel y FIAT en este campo.
La última vez que hablamos sobre nuevos modelos resultantes de la unión de PSA y FCA fue con motivo de una publicación de la web francesa L'argus, quienes apuntaban que un pequeño coche eléctrico en forma de SUV basado sobre la plataforma estrenada por el FIAT 500 eléctrico, llegaría alrededor de 2022, y que tomaría la nomenclatura del ya difunto (comercialmente) 1008, y cuya condición de eléctrico le haría llamarse Peugeot e-1008.
Citroën ë-C1 eléctrico renderizado por el artista.
El diseñador Dejan Hristov ha ejecutado su particular visión de la inminente hornada de utilitarios eléctricos de la unión entre ambos grupos, tenemos la excusa perfecta para intentar dilucidar las claves fundamentales de estos pequeños urbanitas eléctricos.
El artista ha ilustrado una visión muy precisa y lógica sobre cómo podrán ser los fututos diseños de esta nueva oleada de pequeños coches eléctricos de Stellantis de las manos de Peugeot, Citroën, Opel, FIAT y también de su firma premium DS. Aunque no podemos dejar de tener en cuenta que se trata de un ejercicio de diseño completamente ajeno a las firmas, y que como tal, no tienen nada de oficial.
La apuesta de Opel en el campo de los urbanitas eléctricos ocupará el hueco en la gama que dejó el Opel Karl.
Por tanto, tomando las mismas cotas entre unos y otros, y elementos en común como el techo, la zaga (en su totalidad) puertas y aletas, sólo ha personalizado para cada uno el frontal de cada coche, con un resultado que se puede calificar como muy acertado, ya que recurre al uso de múltiples elementos en común entre todos los modelos para mantener los costes de desarrollo y fabricación a raya, algo que tuvo cabida en la última generación de los Toyota Aygo, Citroën C1 y Peugeot 108.
Y es que Dejan Hristov ha sabido acoplar el lenguaje de diseño de cada firma de Stellantis a cada modelo, integrando perfectamente los rasgos diferenciadores entre unos y otros. En el Citroën ë-C1 ha usado las características lamas que tiene los dos chevrones de su logo como origen, mientras que en el Opel ha integrado perfectamente el faro vertical que ya ha tenido cabida en otros modelos de producción como la última generación de la Zafira.
DS1 E-Tense, renderizado por el artista.
En el caso del DS1 el diseño frontal que da protagonizado por unas rasgadas ópticas verticales y una parrilla abierta, de similares proporciones a la que ha usado en el Peugeot e-108.
Curiosamente también se ha atrevido a diseñar el modelo que potencialmente lanzaría FIAT, con rasgos tomados del FIAT 500 eléctrico, y aunque pueda parecer que en un principio ambos modelos se pisen en cuanto a planteamiento urbano dentro de la gama, un FIAT Panda eléctrico de corte más asequible que completaría la gama eléctrica de FIAT por la parte baja de manera muy acertada, ya que recordemos que el 500 es un producto orientado hacia un público que busca una imagen distinguida pero también premium.
Un coche eléctrico urbano más asequible que el 500 dentro de FIAT tiene mucho sentido, y el Panda es el principal candidato a ganar tal versión.
Todos y cada uno de estos modelos, tomarán como base la plataforma del FIAT 500 eléctrico, como adelantó L'argus que pasará con el Peugeot e-1008, y que se enfrentarán directamente a la apuesta eléctrica urbana de Volkswagen, el ID.1, así como a la iteración de Skoda en este mismo campo, de la que hablamos ayer mismo.