Los neumáticos son uno de los componentes más importantes en un automóvil, ya que es el único elemento que está en contacto directo con el asfalto. Por este motivo, es importante conocer qué información hay en cada una de las unidades. Entre las diversas marcas que se pueden leer en el lateral, podemos encontrar un curioso punto rojo. ¿Cuál es su función y qué otros datos deberías conoer al respecto?
El punto rojo de los neumáticos y demás información de relevancia que contienen
El punto rojo es una señal que, de cara al usuario, no es de vital importancia. Sin embargo, este testigo sí permite al empleado del taller conocer cómo tiene que montarse la rueda sobre la llanta. De esta manera, se conseguirá un rendimiento óptimo durante la conducción, así como evitar un posible desgaste prematuro. En términos técnicos, esta marca de color rojo permite conocer dónde se encuentra el punto exacto de máxima variación de fuerza radial (RFV por sus siglas en inglés).
El ojo humano no está capacitado para saber dónde está situado este punto, por lo que recurrir a esta información garantiza que el neumático ha sido acoplado a la perfección. Así, la alineación en el conjunto del vehículo es perfecta, teniendo repercusión en el ciclo de vida de la rueda y, por supuesto, en el consumo de combustible y la seguridad del mismo. Al mismo tiempo, es posible encontrar otro testigo, esta vez de color blanco, que permitiría conocer el punto de mínima variación de fuerza radial de los neumáticos.
Junto a este punto de color, los fabricantes de gomas tienen la obligación de incorporar información adicional. Se trata de elementos que permiten al usuario conocer la compatibilidad de la rueda para el vehículo de que se trate y otra serie de datos referentes al mes de producción o dimensiones. Más concretamente, estos son los principales datos que se incluirán en la mayor parte de ruedas que se encuentran en comercialización:
- Altura del neumático
- Estructura del neumático
- Diámetro de la llanta
- Índice de velocidad
- Índice de carga
Estos datos, de forma agregada, permiten conocer cuáles son las medidas que posee el neumático, qué tipo de vehículos son compatibles con este tipo de compuesto y, por supuesto, qué peso máximo puede soportar y a qué velocidad máxima se garantiza un rendimiento óptimo. Además, se puede conocer cómo ha sido producida cada rueda y mediante qué técnica de fabricación, un apartado que queda reservado mediante la mención de una letra.
Por otro lado, los neumáticos cuentan con una especie de testigos en las bandas de rodadura que permiten conocer la vida útil restante de los mismos. Si estas marcas pueden llegar a estar en contacto con el asfalto quiere decir que deben ser sustituidos por unos nuevos en el corto plazo, ya que han reducido su eficiencia notablemente.
Escoger un tipo de neumático concreto y adecuado para el tipo de conducción que se practique es de vital importancia. No escatimar presupuesto en este componente puede ser la diferencia en caso de peligro. En este sentido, recurrir a marcas de reconocido prestigio puede ser el mejor consejo que te podemos dar para mejorar la seguridad en cada uno de los desplazamientos que se realicen.
