La entrada en vigor, el pasado 1 de enero, de la denominada norma CAFE -las siglas en inglés de Clean Air For Europe- lleva preocupando meses a los fabricantes de coches presentes en los 27 países miembros de la UE.
Esta norma no es otra que la limitación, por parte de la UE, de que las gamas de los vehículos a la venta en 2025 no puedan sobrepasar, de media, los 93,6 gramos de CO2/km. Y la última idea de los fabricantes para tratar de evitarla es recurrir a Tesla, la empresa de Elon Musk, y a Polestar.
Comprar ‘créditos de carbono’, la treta de los fabricantes contra la norma de la UE
Conscientes de lo difícil que les resultaría cumplir con la exigencia de la UE -que supondría que los fabricantes vendieran en torno a un 22% de coches eléctricos en la UE; cuando la media este 2024 se ha situado en el 15%-, las marcas de coches han estado presionando al Ejecutivo europeo para que este retrasara la entrada en vigor de esta norma o, al menos la suavizara.
Así, lo pidieron durante los últimos meses de 2024 varios países, encabezados por Alemania, e incluso lo solicitó ACEA, la patronal europea de fabricantes. Pero Europa se ha mantenido firme y la norma entró en vigor el pasado 1 de enero.
Elon Musk, Tesla y Polestar, ganadores sí o sí en esta situación
Ante la intransigencia de la UE, la noticia saltaba hace unos días: los fabricantes estarían interesados en adquirir ‘créditos de carbono’ a empresas de coches eléctricos como Polestar o Tesla, la compañía que dirige Elon Musk para, de esta forma, rebajar sus emisiones medias y evitar unas sanciones que, según cálculos de la industria, podrían alcanzar los 15.000 millones de euros.
La adquisición de esos créditos, que se disfrazaría de alianza empresarial entre varios fabricantes a la hora de presentar y gestionar las emisiones de sus vehículos, tiene importantísimos actores a favor como Stellantis pero, también, detractores tan potentes como el Grupo Renault.
Eso sí, lo que todo el mundo tiene claro es que las compañías de coches eléctricos como Tesla serían las grandes ganadoras si se llegara finalmente a este acuerdo.
Casi mil millones de euros en compensaciones para Tesla y Elon Musk
Ahora, la consultora suiza UBS acaba de publicar un estudio en el que se atreve a dar cifras de lo que supondría la venta de estos ‘créditos de carbono’ por parte de Tesla.
Según esta compañía, si Stellantis, Toyota y Ford -las compañías interesadas en ‘aliarse’ con Tesla- llegaran a un acuerdo con la empresa dirigida por Elon Musk, la compañía norteamericana y su CEO podrían simplemente ceder sus ‘créditos de carbono’ a cambio de unos 1.000 millones de euros, el equivalente a 971 millones de euros.
Una cifra que, a Elon Musk, que acaba de ver cómo, por primera vez en 10 años, las ventas de Tesla se reducían respecto al año anterior, le alegraría sin duda el inicio del año.
Es más, según la estimación de UBS, las ganancias de Elon Musk y Tesla por no hacer absolutamente nada podrían llegar a superar esa cifra: "la compensación para Tesla podría incluso superar los 1.000 millones de euros” si la empresa estadounidense juega bien sus cartas, asegura el informe publicado por UBS.
Y ojo, porque UBS no se olvida de Polestar, la otra compañía de coches eléctricos de la UE. Así, y para ella, calcula que Mercedes-Benz, Volvo y Smart -que buscan ‘aliarse’ con la compañía sueca de coches eléctricos, podrían aportar 300 millones de euros por esta alianza si esta les permite salvar la normativa de la UE y, de esta forma, evitar las citadas sanciones de la UE.