De toda la gama de coches eléctricos existente en el mercado actual, hay unos que destacan por encima del resto gracias a su diseño, prestaciones, cifras o, sobre todo, por su precio. Precisamente sobre este último punto inciden dos de los vehículos eléctricos que venimos a comparar hoy. Uno está fabricado en España, pero proviene de Francia; su rival es de una marca británica que ahora es china.
Por supuesto, hablamos del Citroën ë-C4 y del MG4. Dos eléctricos que rivalizan entre sí, a pesar de sus múltiples diferencias en casi la mayoría de apartados. Ambos están haciendo dudar a muchos potenciales clientes de cuál será la opción más apropiada. Hoy aquí vamos a mostrar los pros y contras de cada uno de ellos para que tengas más fácil tu voto decisivo.
La estética de Francia contra la de China
En primer lugar, hay que hablar de su estética, el primer punto por el que un coche es capaz de encandilar a su posible propietario. Ambos casos cuentan con una imagen poco menos que llamativa. En el caso del Citroën, para empezar, dejó a todos sorprendidos durante su puesta de largo, hace ya algunos años, a causa especialmente de sus grupos ópticos divididos tan particulares y originales, tanto en su frontal como en su zaga. A esto se sumó su fisionomía de crossover que siempre da un plus a los clientes.
El MG4, por su parte, cuenta con un diseño quizás algo más arriesgado en lo que se refiere a elementos estéticos meramente decorativos. Especialmente, sobre su zaga se ubican unos puntos de luz que le dan mucha personalidad al conjunto. También hace lo propio su alerón trasero dividido o sus grandes grupos ópticos delanteros.
Como ya hemos mencionado, la imagen de ambos es más que acertada y las medidas son realmente próximas. El Citroën ë-C4 mide 4.360 mm de longitud, 1.800 mm de ancho y 1.520 mm de alto. El MG4 presenta las siguientes medidas: 4.287 mm de longitud, 1.836 mm de ancho y 1.504 mm de alto. Prácticamente calcados en ancho y alto, pero con una diferencia de algo más de seis centímetros de longitud en favor del Citroën. ¿A dónde van esos centímetros adicionales? Al espacio interior, tanto para los propios ocupantes como para el volumen del maletero.
Un interior más que apropiado
Comenzando ahora por el MG4, el interior cuenta con buenos materiales tapizando sus paneles y asientos, pero también con una doble pantalla de información y entretenimiento situadas sobre el salpicadero. La primera se ubica tras el volante, hace las funciones de instrumentación y cuenta con una diagonal de 7 pulgadas. En el centro del espacio se ubica la destinada al sistema multimedia y cuenta con 10,25 pulgadas. Por supuesto, el MG4 es compatible con Apple CarPlay y Android Auto.
El habitáculo del Citroën ë-C4 es más llamativo en cuanto a sus formas, con elementos muy diferenciados de su competencia. Igualmente cuenta con dos pantallas sobre el salpicadero: instrumentación digital de 5 pulgadas y panel multimedia de 10 pulgadas. En el resto de apartados ambos están muy igualados. Los dos pueden contar con calefacción en los asientos, climatización bizona o cargador inalámbrico para smartphone.
También el espacio habitable interior es muy bueno, especialmente observando las plazas traseras. En la segunda fila, el Citroën ë-C4 cuenta con un poco más de espacio adicional frente al MG4, aunque presentan la misma anchura (para que dos adultos viajen cómodamente) y una altura al techo calcada, pese a la propia forma del techo del Citroën.
Por último, mirando sus respectivos huecos de carga, el MG4 ofrece un volumen de 363 litros. El Citroën ë-C4 cuenta con 380 litros, siendo vencedor en este particular ranking por unos pocos centímetros adicionales. En ambos, sus asientos traseros se pueden abatir para ganar espacio, alcanzando así los 1.250 litros en el caso del francés y los 1.177 litros para el chino.
Diferencias en sus mecánicas eléctricas
Hora de entrar de lleno en el análisis de sus mecánicas eléctricas. El Citroën ë-C4 cuenta con dos opciones de potencia y batería. La primera variante y más barata presenta una potencia de 136 CV. Su esquema de motor único está alimentado por una batería de 50 kWh de capacidad y genera una autonomía de 351 kilómetros. Alternativamente, existe un ë-C4 más prestacional, con 156 CV y batería de 54 kWh que genera hasta 415 kilómetros de autonomía.
El MG4, por su parte, cuenta con un catálogo algo más extenso. Como acceso a la gama existe uno con motor eléctrico único de 170 CV de potencia que está alimentado por una batería de 51 kWh. Su autonomía homologada es de 350 kilómetros. Un paso por encima se encuentra la alternativa de 204 CV y batería de 64 kWh, con 435 km de autonomía. Como variante más codiciada se encuentra la llamada Extended Range, con batería de 77 kWh, autonomía de 520 kilómetros y 245 CV. Finalmente, como opción deportiva está el XPower de 435 CV.
En este caso, el MG4 es un claro vencedor en cuanto a diversidad de opciones mecánicas. También cuenta con mayor potencia de acceso y una autonomía prácticamente calcada entre ambos en sus respectivas versiones más baratas.
La hora de la verdad: sus precios en España
Las tarifas suelen ser un motivo de peso para inclinarse por una opción u otra. En el caso que hoy nos ocupa existen diferencias entre ambas opiciones, aunque las dos son perfectamente viables para un mismo tipo de cliente, tal y como hemos visto en la descripción de su equipamiento y mecánica. Entonces, ¿de qué precio parten ambos coches eléctricos?
El Citroën ë-C4 tiene un precio de partida en España de 32.655 euros, en su versión de acceso con 351 km de autonomía y 136 CV de potencia. La variante más accesible del MG4 parte de los 31.440 euros.
Ambos modelos pueden contar con el Plan Moves III de ayudas estatales, así como con otros descuentos propios de las respectivas compañías. Con todo esto incluido, el MG4 puede situarse en los 19.000 euros, mientras que el Citroën podrá contar, a priori, sólo con el Plan Moves III, lo que lo situará finalmente en torno a los 25.000 euros.