SVOLT Energy Technology es un fabricante de baterías chino, filial del fabricante de automóviles Great Wall (también de origen chino), y ahora acaba de saltar a la palestra al presentar una batería de iones de litio que no emplea cobalto (NMx), la primera batería de este tipo para coches eléctricos que se da en el mundo.
Según la propia SVOLT, esta nueva batería sin colbato es igual de potente y eficiente que las de celdas NCM-811, pero tienen un coste de fabricación entre un 5 y un 15 por ciento menor, con un coste unitario por celda hasta un 5% inferior. A pesar de estas afirmaciones, SVOLT no mencionó más detalles sobre los materiales empleados ni la proporción de los mismos, la estructura de la celda, ni dio una fecha para el lanzamiento al mercado de esta tecnología.
Actualmente, las baterías necesitan multitud de minerales para su fabricación; para las de iones de litio es fundamental el níquel, el cobalto y el manganeso (NCM), que se emplean en distintas proporciones para el cátodo de la batería. Sin embargo, el cobalto es quizá el recurso más polémico. La razón es que el mayor productor mundial, la República Democrática del Congo, emplea mano de obra infantil para la extracción de este mineral y quebranta los Derechos Humanos fundamentales en el resto de mineros adultos, por lo que reducir la dependencia de este mineral se hace fundamental para muchos fabricantes.
Además de esta nueva batería de iones de litio sin cobalto, SVOLT presentó también una batería NCMA cuyas prestaciones superan a las NCM-811 en todos los sentidos. Tienen una vida útil más larga, mejor resistencia al calor y es más segura. En esta ocasión, la compañía china tampoco proporcionó detalles sobre la cantidad de aluminio empleado ni el cobalto que (en esta sí) todavía está presente.
Esta noticia llega tras el anuncio de SVOLT en el que confirmó sus planes para construir en Europa una megafábrica de baterías para coches eléctricos. Aunque aún se desconoce la localización exaca, el inicio de la construcción está previsto para la segunda mitad de 2020 y esperan haberla terminado para 2022. Lo que sí sabemos es que tendrá una capacidad aproximada de 24 GWh y que su inversión llegará a los 2.000 millones de euros.