Desde su silencio, Apple continúa dando forma a la que será su incursión en la industria del automóvil. Sin mediar por ahora ningún comunicado oficial, todo el mundo habla del Apple Car como un coche eléctrico y autónomo real y muy esperado que verá la luz a mediados de la década. De él se espera sobre todo lo que es la señal de identidad de Apple: innovación. Una parte de ella puede venir de la patente que se ha dado a conocer. Un techo solar corredizo que cuenta con un cristal que permite variar su traslucidez apretando solo un botón y, por lo tanto, decidir la cantidad de luz que deja pasar al habitáculo.
Con el nombre en código de Project Titan, el Apple Car es un vehículo eléctrico autónomo enfocado en la tecnología. Apple ahora está luchando para encontrar una empresa que lo ensamble. Una búsqueda compleja que, después de conversaciones fallidas con una serie de fabricantes de automóviles tradicionales, entre los que se incluye Hyundai, ha cambiado de rumbo. La firma de Cupertino ahora está buscando un acuerdo con un fabricante por contrato. Los últimos rumores indican que una empresa conjunta entre Magna y LG podría, eventualmente, construir el Apple Car, lanzando un primer prototipo en 2023 para poner en el mercado el modelo final de producción en 2025.
Como parte de él, el fabricante del iPhone ha patentado un nuevo diseño de techo corredizo cuyo propósito sería que los ocupantes decidan cuanta luz quieren que pase al interior del habitáculo. Si dicho así la idea no parece nueva, como ha ocurrido en otras tecnologías, lo principal es ver como Apple ha implementado la variación de la traslucidez del cristal para darle un enfoque práctico e intuitivo.
El texto de la patente explica que "el área de translucidez variable cambia de un estado oscurecido a un estado aclarado en respuesta al movimiento del conjunto del panel móvil desde la posición cerrada a la posición abierta".
Según la patente el área de traslucidez del techo del Apple Car es variable.
La patente denominada Movable panel assemblies (ensamblaje de paneles móviles) fue otorgada a Apple el 1 de febrero de 2022. Su existencia no implica que este techo vaya a pasar a producirse de manera inmediata, ni siquiera que algún día llegue a convertirse en realidad, pero sí hace pensar que el Apple Car es cada vez más un secreto a voces. Fuentes cercanas aseguran que su CEO, Tim Cook, lo considera un producto de máxima prioridad.
Incluso si finalmente el coche eléctrico del fabricante de Cupertino no se hiciese realidad, la inversión en desarrollo podría dar como resultado que al menos se convirtiese en un proveedor de tecnología con gran importancia en el mercado.