Durante el día de hoy hemos conocido más detalles acerca de la expansión de Tesla y la construcción de una nueva fábrica en China. Según un informe de Bloomberg, los terrenos situados a las afueras de Shanghái en los que Tesla establecerá su Gigafábrica número 3, donde fabricarán coches eléctricos y baterías bajo una misma estructura, costarán a la empresa californiana 145 millones de dólares (más de 125 millones de euros). La compañía dirigida por Elon Musk ya ha hecho una oferta formal por la propiedad y pronto emprenderá la construcción de su primera planta productiva fuera de los Estados Unidos.
Tesla se ha visto forzada a acelerar la construcción de la nueva fábrica china debido a la escalada de tensión en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que ha resultado en un incremento de los impuestos aduaneros hasta el 40%. Esta cifra supone una desventaja, según Tesla, de "entre el 55% y el 60%" si tenemos en cuenta los costes de transporte transoceánico en comparación con el mismo producto fabricado localmente. Además, la compañía estadounidense sigue sin beneficiarse de las ayudas gubernamentales a la compra de vehículos eléctricos, que según la propia Tesla "rondan el 15% del precio o más para los coches eléctricos fabricados en China".
Los planes iniciales se podrían acelerar
Vista la situación crítica que vive la marca, con la valoración de sus acciones un 33% por debajo del máximo anual alcanzado el pasado agosto (379,57 versus 256,88 dólares al cierre de ayer) tras el famoso "tuit de los 420 dólares" que le costó a Elon el cargo de presidente, Tesla está apretando el acelerador en busca de solvencia económica. Por un lado la fabricación y las entregas del Model 3 se han acelerado, llegando a superar las 50.000 unidades el último trimestre, mientras que por el otro, la apertura de la fábrica en Shanghái parece haber tomado la velocidad de crucero que necesita el proyecto.
Inicialmente Tesla había planificado un periodo de 2 años para terminar la construcción de una planta que, tres años después de iniciar operaciones, podría alcanzar una capacidad anual de 500.000 vehículos eléctricos. En cambio, durante la última publicación de resultados de Tesla, Elon Musk dijo que la empresa invertirá alrededor de 2.000 millones de dólares para "desplegar rápidamente" la Gigafactory 3 y alcanzar los 250.000 vehículos anuales lo más temprano posible gracias al know how cosechado durante la expansión de la producción del Model 3 en Fremont.
La Gigafactory 1 seguirá creciendo
Por otro lado, Musk ha reconocido durante una entrevista que la Gigafactoría número 1, situada en el estado de Nevada, EE.UU., planea aumentar su plantilla hasta alcanzar 20.000 empleados, lo que significa prácticamente doblar los planes iniciales. En la actualidad, la fábrica especializada en baterías emplea cerca de 7.000 trabajadores. Para aumentar la fuerza de trabajo hasta el mencionado objetivo, lo que significaría prácticamente triplicar las contrataciones, Tesla pretende invertir en la construcción de viviendas e infraestructuras para facilitar la llegada de operarios y mano de obra especializada a la región. Cabe mencionar que la fábrica de baterías está situada en un parque industrial remoto, dentro del desierto, a unos 40 kilómetros de la ciudad de Reno.
La presencia de una gran factoría en las afueras de una ciudad relativamente pequeña como es Reno, con una población estimada de 225.000 habitantes (datos de 2010), ha provocado que la demanda de viviendas por parte de obreros que llegan a vivir a la región atraídos por la industria local haya aumentado considerablemente en los últimos años. De hecho, según cifras facilitadas por una inmobiliaria local, en la actualidad se estima que hay menos de un 2% de apartamentos disponibles para alquilar, lo que ha provocado un aumento de los alquileres superior al 50% en los últimos seis años.