"ICEing" es un término que usan habitualmente los conductores de un coche eléctrico para describir a quien, con un vehículo de combustión interna, bloquea un punto de carga. Aunque comúnmente son coches térmicos los que definen el comportamiento egoísta de su propietario, esta práctica se extiende también a los que dejan su coche eléctrico allí aparcado aunque la recarga ya haya concluido. Esta práctica es la que ha querido poner sobre la mesa la policía del estado alemán de Baviera aparcando su helicóptero en un Supercargador de Tesla.
Nadie entendería muy bien que un coche eléctrico permaneciese estacionado delante de un surtidor de gasolina mientras su propietario está comiendo o haciendo la compra. Sin embargo, sí se hace en los puntos de recarga, en muchas ocasiones sin ningún tipo de penalización ni disculpa. Además, el efecto es mucho más perjudicial ya que hay muchos menos cargadores de vehículos eléctricos que surtidores de gasolina.
Si a muchos no les sorprende ver un coche de combustión aparcado en un punto de recarga para coches eléctricos, si lo hará un helicóptero estacionado en un Supercargador, tal y como aparece en esta imagen de Twitter. No se trata de un caso de ICEing extremo ni de vandalismo sino de una campaña del Departamento de Policía de Baviera contra el bloqueo de las estaciones de carga.
En este caso, la policía ha preferido adoptar un tono humorístico para visualizar el problema usando su propio helicóptero (por supuesto, de combustión). El departamento agregó un texto en el que mostraban su suerte por haber encontrado tantos puntos de carga disponibles.
Verparkte #Ladesäulen – ein Ärgernis für die, die sie brauchen. Deshalb stellt euch nur auf die ausgewiesenen #Parkplätze,wenn Ihr euer Fahrzeug laden wollt und macht anschließend Platz.
— Polizei Schwaben Nord (@polizeiSWN) August 9, 2022
Unser #Hubschrauber hatte zum Glück mehrere freie Ladesäulen zur Verfügung ????. #PolizeiBayern pic.twitter.com/n6zf6AcdEW
La pequeña campaña reivindicativa de la Policía alemana está también relacionada con la reciente apertura de los Supercargadores de Tesla a otros vehículos eléctricos que no son de su marca, aunque, por ahora, no se refiere a que en ellos también puedan recargar helicópteros (aunque en realidad, sí podrían). Es posible, que el futuro mercado de los eVTOL, las pequeñas aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical pueda hacer uso de ellos, aunque por ahora esto no es más que una especulación.
Tesla es pionera en la implementación de sistemas anti ICEing en sus Supercargadores, aunque solo para coches eléctricos. Precisamente, sus tarifas contemplan una penalización en el caso de que el vehículo conectado a ellos ya haya terminado la recarga. Cuando está totalmente cargado la tarificación pasa a ser por tiempo (no por kWh) y supone un importante incremento en el caso de que el conductor no retire el vehículo. La aplicación de Tesla dispone de un sistema de notificaciones en el móvil que avisa cuando esto ocurre. En el caso de quien estaciones in conectar, es decir, en el caso de vehículos de combustión, por ahora no hay forma de establecer una penalización por su conducta, más allá del sentido común.
Por último, y para esclarecer todos los misterios de esta imagen tan especial, en realidad el helicóptero de la policía nunca aterrizó en el Supercargador. La imagen es un montaje fabricado para visualizar este problema y captar la máxima atención posible.
