Tesla ha conseguido aumentar abruptamente la producción del Model 3 por encima de los 5.000 coches semanales. Ahora, después de apagar los fuegos en lo que a productividad se refiere, el próximo objetivo de la compañía dirigida por Elon Musk es el de ofrecer a sus inversores la seguridad de que su empresa es solvente. El aumento en las entregas de su coche eléctrico para las masas se traducirá en un importante incremento en los ingresos, pues cientos de miles de personas que están esperando una unidad del sedán eléctrico deberán completar el pago del vehículo, y lo harán secuencialmente.
Según diversas fuentes, el fabricante con sede en Palo Alto habría abierto la veda a la configuración del Tesla Model 3 de forma masiva, permitiendo a todos los reservistas de Estados Unidos y Canadá que accedan al configurador para seleccionar la versión, los acabados y el equipamiento de sus nuevos coches eléctricos. Para ello, los clientes de Tesla deberán desembolsar un pago de $2.500 dólares en efectivo a modo de confirmación. Una vez llegado el momento de la entrega, el cliente completaría el pago del vehículo, ya sea en efectivo o mediante crédito.
La medida, que se está llevando a cabo desde el pasado mes de junio y ha provocado reacciones diversas entre analistas y entendidos, supone para muchísimas personas la luz al final del túnel después de una larga espera. En cambio, según Autocar, que se hace eco de la información revelada por Bloomberg, desde la óptica de Tesla podría tratarse de una nueva estrategia para financiar la compañía, pues a falta de entregar los vehículos, un nuevo anticipo en efectivo supone una inyección de liquidez para una empresa que en los últimos ejercicios no ha conseguido salir de los números rojos debido a las importantes inversiones que está haciendo para aumentar la producción de Fremont.
Para acallar las voces críticas, una portavoz de Tesla salió al paso, aclarando que el procedimiento ha sido el habitual. "Tesla siempre ha requerido este depósito para todos sus pedidos de vehículos, incluidos el Model S y el Model X, dado que construimos automóviles según las especificaciones de nuestros clientes", afirmó. Tanto el depósito de la reserva inicial como el adelanto previo a la configuración se destinan al precio de compra del vehículo.
Para hacernos una idea del potencial que tiene Tesla gracias a sus reservistas, si de los cientos de miles de clientes que han recibido la propuesta de configuración para su nuevo Model 3, tan solo 10.000 hubiesen accedido a realizar el pago, esto supondría unos ingresos de 25 millones de dólares que podrían cambiar el sentido del balance de resultados de la empresa californiana. De hecho, Elon Musk aseguró el pasado mes de abril que Tesla presentaría un flujo de caja positivo para el tercer y cuarto trimestre del año, y para conseguirlo no existe otro método que reducir gastos y aumentar los ingresos. Para lo primero, Musk ya tuvo que tomar la decisión de prescindir de un buen número de empleados, y para lo segundo, se estima que actualmente hay unos 410.000 reservistas esperando su nuevo Tesla Model 3.