¿Qué tienen en común nombres como Lucid, Wallbox, NorthVolt, Proterra, Sila, Lyten o Redwood? Aparte de ser algunas de las empresas tecnológicas más importantes relacionadas con la movilidad eléctrica de hoy en día, todas ellas han sido fundadas por antiguos directivos de Tesla. Y es que, si no cabe duda de que la compañía norteamericana ha revolucionado el mundo del automóvil como nadie lo había hecho desde los tiempos de Henry Ford, también parece indiscutible que ha sido el germen de una generación de emprendedores que parecen dispuestos a dejar su huella y su impacto en el mundo energético y del transporte eléctrico.
Fenómenos similares vimos anteriormente con otras compañías como Microsoft, Apple o Google y más intensamente con PayPal, cuna de los fundadores de Linkedin o de la propia Tesla. Ahora, es la compañía que fundó Elon Musk tras salir de la plataforma de pagos la que se ha convertido en el trampolín de muchos de los proyectos llamados a revolucionar el panorama tecnológico y empresarial mundial.
Volta Foundation, organización sin ánimo de lucro italiana especializada en baterías, ha elaborado una curiosa infografía en la que reúne a 23 de estos fundadores con sus respectivos proyectos bajo la curiosa etiqueta de Tesla Mafia, precisamente parafraseando la denominación de PayPal Mafia con el que en su día se denominó a los ex empleados de esta compañía que montaron grandes negocios.
Volviendo a los Tesla Mafia, sólo la mitad de estas iniciativas suman más de 23.000 millones de dólares de valoración, según se recoge en el informe. Y, aunque es cierto que esta cifra está lejos de los más de 500.000 millones de la propia Tesla (según diferentes fuentes), no es menos verdad que representan un movimiento al alza.
Tres son las conclusiones que extrae Volta de esta infografía:
- Son globales. La ‘influencia’ de Tesla se ha extendido más allá de EEUU: Northvolt, por ejemplo es sueca. Wallbox, española, y XCharge, china, lo que demuestra que estamos en una economía cada vez más global, que, como dicen en el informe, “no tiene por qué tener en Silicon Valley su centro de operaciones”.
- No todos son ingenieros. El perfil del ingeniero suele ser dominante en las empresas especializadas en tecnologías y energías limpias, pero en el caso de los Tesla Mafia, encontramos perfiles de todo tipo: economistas, financieros, especialistas en logística…
- Y han puesto el hardware por bandera. Tras unos años de auténtico predominio del software en las empresas tecnológicas, cada vez más empiezan a triunfar las empresas que ponen el hardware por bandera o que aúnan hardware y software, como es el caso de los integrantes del selecto club que nos ocupa. Así las vemos triunfar en producto físico puro y duro, como Sila, Lyten, Lucid, Northvolt o Verkor, por ejemplo. O en la combinación de hardware y software, como Wallbox, Lunar Energy o Powerline, entre otros.
Un español y una mujer
De esta lista nos llama la atención dos detalles: sólo hay un español y sólo hay una mujer.
El español es Enric Asunción, CEO y fundador de Wallbox. Llegó a ser responsable de carga doméstica para Europa hasta que en 2015 decidió dar el paso de crear su propia empresa de cargadores domésticos.
“En 2015 no había casi coches eléctricos. El único que trataba de hacerlos era Tesla. Y los fabricantes de cargadores, que eran mis partners entonces, se enfocaban en dispositivos para la calle, nadie pensaba en hacer cargadores para la casa. Y ahí pensé: ‘ostras, el problema más grande que tiene el usuario de coche eléctrico es el poder cargar en casa, en la comunidad de vecinos, que no le suba el precio de la energía, que no le pregunten en el concesionario qué potencia tiene contratada en su casa…. En eso nadie se estaba enfocando”, explicaba recientemente en una entrevista a Emprendedores.
En esa misma publicación no dudaba en hablar así del propio Musk: “Es un genio. Es capaz entender lo que es realmente importante para el cliente y es capaz de cambiar una industria. Gracias a él y a su empresa hoy tenemos coche eléctrico. Cuando yo trabajaba en Tesla todos teníamos el convencimiento de que, si fracasábamos, nunca habría coche eléctrico. Y eso es algo muy potente porque no estás luchando para sacar adelante un negocio, estás luchando para cambiar un mercado. Y eso es lo que quiero transmitir ahora en Wallbox”.
Hoy, Wallbox cotiza en la Bolsa de Nueva York, cuenta con más de 1.400 empleados, está presente en más de 113 países, tiene cuatro plantas de producción (dos en Barcelona, otra en Texas y una tercera en China) y 19 oficinas en otros tantos países.
La mujer es Celina Mikolajczack, quien fuera senior manager de Battery Technology, Cell Quality and Materials Analysis en Tesla y hoy es vicepresidenta de baterías de Lyten, una de las principales compañías de pilas del mundo.
Otros nombres relevantes
Pero hay unos cuantos nombres llamativos en la lista que merece analizar, tales como Peter Rawlison, CEO y fundador de de la compañía de coches eléctricos Lucid y protagonista de más de un encontronazo mediático con Musk. Antológicas son sus continuas y recíprocas puyas. O Ryan Popple, quien fuera director de Finanzas de Tesla y fundador de Proterra en 2014, uno de los principales fabricantes de autobuses eléctricos de Estados Unidos y una de las compañías más comprometidas con la lucha contra el cambio climático, y que falleció en 2021.
Destaca también el ex fundador y CTO de Tesla hasta 2019, JB Straubel, quien abandonó la compañía para especializarse en el reciclaje de baterías y componentes electrónicos a través de la compañía Redwood Materials, hoy con una valoración cercana a las 3.700 millones de dólares (fuente CBInsight).
O Peter Carlsson, quien fuera vicepresidente de Supply Chain de Tesla hasta 2015 y desde 2016 es el fundador y CEO de una de las compañías de baterías más importantes a nivel mundial, Northvolt, con una valoración superior a los 9.000 millones de dólares (fuente CBInsight).
También está por ahí Gene Berdichevsky quien fue el séptimo trabajador contratado por Tesla en 2004. Vio nacer y crecer el proyecto hasta que en 2008 decidió probar suerte por su cuenta especializándose en uno de los componentes: las baterías. Así fue como en el año 2011 fundó Sila Nanotechnologies que hoy está valorada en 980 millones de dólares (según CrunchBase. Bloomberg).
A estos nombres, todavía podrían añadirse algunos otros vinculados en su pasado a la compañía aunque de forma más indirecta, como es el caso de Sterling Anderson, cofundador de la empresa de coches eléctricos autónomos Aurora Innovation, que colaboró con Tesla en el desarrollo del Autopilot. O el de Henrik Fisker, cofundador y CEO de la empresa de coches eléctricos que lleva su nombre, Fisker, que fue contratado por Musk para el diseño del Model S.
Y esto sólo acaba de empezar. No en vano, Tesla apenas tiene 20 años de vida. Seguro que en pocos años veremos surgir de sus instalaciones alguno de los emprendedores destinados a revolucionar el transporte o la energía del futuro. La semilla está ya plantada.