Quizá suene absurdo o ilógico, pero Tesla apoya el plan de la administración Trump de eliminar los incentivos fiscales para la compra de vehículos eléctricos. Una medida que afecta directamente a su negocio principal, los coches eléctricos, donde fue líder mundial en 2023.
Elon Musk ha apoyado la candidatura de Donald Trump, tanto económicamente como a nivel propagandístico; el máximo dirigente de Tesla llegó a publicar más de cien tweets diarios, durante varios días, cuando estaban en plena campaña electoral. La mayoría de ellos con mensajes de apoyo a Trump o sus políticas. Un apoyo que ahora también alcanza una de las medidas que afecta directamente a Tesla, la eliminación del subsidio federal de 7.500 dólares para incentivar la compra de coches eléctricos.
El director ejecutivo de Tesla ha mostrado su apoyo a Trump cuando este dijo que planea retirar el crédito federal de 7.500 dólares para vehículos eléctricos una vez que vuelva a la Casa Blanca. Los representantes de Tesla, el mayor fabricante de vehículos eléctricos en 2023, han dicho a un comité de transición energética de Trump que apoyan la eliminación del subsidio. Aunque Musk no controla oficialmente la junta de Tesla, en la práctica están muy cerca las posiciones personales de Musk con las de Tesla como compañía.
En palabras de la propia compañía, "la misión de Tesla es acelerar la transición mundial hacia la energía sostenible", pero Musk parece haber cambiado de enfoque. En tiempos pasados, Tesla presionó al gobierno estadounidense para tener ayudas a la compra de vehículos eléctricos. Musk incluso llegó a renunciar a formar parte del consejo empresarial de la anterior administración Trump cuando este sacó a Estados Unidos del acuerdo climático de París.
Ahora, sin embargo, Musk ha llegado a plantear un escenario en el que la eliminación del crédito fiscal perjudicaría a Tesla, pero cree que perjudicaría más a otros fabricantes, eliminando parte de la competencia. Puede sonar audaz desde el punto de vista de su empresa, pero entra en directa contradicción con lo que Musk ha dicho muchas veces en el pasado: el éxito de Tesla puede alentar a toda la industria a pasarse a los vehículos eléctricos. El CEO de Tesla también dijo recientemente que el principal problema con los vehículos eléctricos es que su precio es demasiado alto, cosa que las ayudas alivian en parte.
Donald Trump ha ganado las elecciones de Estados Unidos 2024, pero no tomará posesión del cargo hasta principios de 2025. El presidente electo de Estados Unidos ha designado a Musk como responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental, un nuevo organismo encargado de reformar la Administración pública estadounidense para reducir el gasto público.
El "equipo de transición energética" de Trump ya estaría elaborando las estrategias para eliminar el crédito fiscal para vehículos eléctricos. No obstante, para quitar dicho incentivo se necesita la aprobación del Congreso. Según Reuters, el equipo de transición energética está dirigido por Harold Hamm, un multimillonario estadounidense pionero del fracking como método de extracción de petróleo y gas. Fundó la compañía Continental Resources, que actualmente produce unos 400.000 barriles de crudo diariamente. Según Forbes, Hamm tiene una fortuna de 18.500 millones de dólares.