Tesla ha confirmado que la versión europea del Model 3 incorporará un conector de carga CCS —Combined Charging System— que le permitirá utilizar las redes europeas de recarga rápida que emplean este estándar para la carga en corriente continua. Paralelamente, el fabricante californiano ha anunciado la llegada de un adaptador para el Model S y el Model X, que podrá adquirirse como un accesorio más.
El esperado cambio de conector de la versión europea del Model 3 implica la necesidad de que Tesla actualice toda su red de Supercargadores europeos. Técnicamente el conector actual de carga de Tesla para Europa, que llevan el Model S y el Model X, a pesar de su parecido con el tipo 2 —también conocido como Mennekes—no es exactamente igual. Gracias a la mayor longitud de sus contactos, los coches eléctricos de Tesla pueden recargar a través de él tanto en corriente alterna, monofásica y trifásica, como en corriente continua. Sin embargo, el estándar CCS europeo incorpora un segundo conector con dos bornes en la parte inferior, que es por donde pasa la corriente continua. Por esta razón los modelos de Tesla actuales sí pueden cargar en estaciones europeas de carga en alterna, y en la red de cargadores en destino de Tesla, pero no en las de carga rápida (corriente continua).
Estándar de carga CCS. A la izquierda el cable de la estación. A la derecha el puerto de carga del vehículo. La parte superior corresponde a la recarga el corriente alterna. Los dos bornes inferiores se utilizan para la recarga en corriente continua.
Para que el Model 3 pueda utilizar la red de Supercargadores europea, con más de 430 ubicaciones y 3.600 puntos de carga, Tesla tendrá que actualizarla. Antes de que el Model 3 llegue a Europa, instalará en todos los puestos un segundo cable con el conector CCS Combo, que será el que utilicen sus propietarios para poder recargar.
El Model 3 ha llegado ya a las tiendas europeas donde será mostrado durante las próximas semanas. Las entregas comenzarán a principios del año que viene, una vez que se abra el configurador web y los primeros clientes con reserva puedan cerrar sus pedidos.
Los propietarios de un Tesla Model S o Model X podrán adquirir próximamente un adaptador, que se conecta al cable de la estación de carga CCS, y que permitirá que puedan utilizar también este tipo de estaciones. Estos ya disponen actualmente de un adaptador para la recarga bajo el formato CHAdeMO, el otro estándar de carga rápida en corriente continua, que Tesla vende como accesorio, pero que tiene bastantes limitaciones y no es compatible con el Model 3. Se espera que el precio del adaptador CCS sea similar al CHAdeMO, que actualmente ronda los 500 euros.
Así será el conector CCS de Tesla para el Model 3.
En una entrevista concedida a Auto Express, Drew Bennett, jefe de infraestructura de carga global de Tesla, ha explicado la estrategia de recarga europea de Tesla. "Continuaremos invirtiendo en nuestra red", ha asegurado, "pero permitiremos que nuestros propietarios tengan acceso a las redes CCS que están comenzando a crecer en Europa. Todos nuestros clientes podrán usar la red de Supercargadores y además aventurarse fuera de ella".
En cuanto a la posibilidad de que el resto de coches eléctricos del mercado puedan utilizar la red de Supercargadores de Tesla, Bennett afirmó estar "definitivamente abiertos a negociar con ellos. Muchos fabricantes de automóviles nos han hablado sobre ello, pero no hemos tenido ninguna discusión concluyente al respecto".
La red europea de carga ultrarrápida
Con este conector o con el adaptador, los coches eléctricos de Tesla podrán realizar recargas rápidas no solo en la extensa red de Supercargadores de Tesla sino también en las redes de recarga ultrarrápida que están empezando a instalarse en Europa. Entre ellas una de las más importantes es Ionity, creada por BMW, Daimler, Ford y el Grupo Volkswagen. En el proyecto europeo Ultra-E participan tanto fabricantes de automóviles como empresas de servicios públicos. Mega-E, es la red de recarga propiedad de Allego y Fortum Charge & Drive y, por último E-VIA FLEX-E es un proyecto experimental para la instalación una red de recarga europea que en su primera fase contará con e 14 estaciones de recarga ultra rápidas en Italia, Francia y España.
Tesla no ha especificado la potencia a la que podrá cargar el Model 3 bajo el estándar CCS que, teóricamente, es superior a los 120 kW que alcanzan los Supercargadores. En todas estas redes se anuncian potencias de hasta 350 kW, aunque las primeras estaciones que se están implementando llegan a 150 kW.