Tesla, en sus inicios, supo poner un punto y aparte en todo lo conocido hasta la fecha sobre coches eléctricos. La marca con origen en el Estado de California le dio una vuelta de tuerca a todos los aspectos hasta el momento conocidos y presentados por otras firmas; modelos como el Fisker Karma (todo un adelantado a su tiempo) perdió la batalla, mientras que el Tesla Roadster supuso el germen de todo lo que hoy en día conocemos como Tesla. Todavía, a día de hoy, podemos dar con alguna unidad de segunda mano de este pequeño deportivo biplaza, aunque olvídate de precios contenidos.
Hace algo menos de un año ya os pudimos hablar aquí sobre la alta cotización en el mercado que estaba alcanzando este modelo, pero a día de hoy incluso se ha incrementado. ¿Estamos ante todo un clásico de nuestro tiempo? Sin lugar a dudas, sí. Recordemos que este fue un modelo con capacidad para dos ocupantes y descapotable (de ahí su nombre); se basaba sobre la plataforma de un Lotus Elise, aunque con un tren motriz completamente eléctrico. Sus capacidades no se quedaban muy lejos de lo que nos ofrecen a día de hoy muchos coches eléctricos actuales. Fue capaz de homologar una autonomía según ciclo EPA de casi 400 kilómetros, mientras que su potencia, que rozaba los 300 CV, lo catapultaban hasta lo 100 kilómetros por hora en apenas 3,7 segundos, alcanzando más tarde una velocidad máxima de 201 km/h.
Como vemos, sus especificaciones son más que dignas para tratarse de un modelo con más de una decena de años encima. Pero ¿desde cuánto podemos hacernos con uno a día de hoy? Según los diferentes portales de anuncios españoles, en el momento de redactar este artículo, en nuestro país no contamos con unidades en venta de segunda mano, aunque sí podemos ver algunas de ellas anunciadas en Europa mediante webs que den cobertura sobre todo el continente. En estas podemos apreciar como su precio se ha disparado o mantenido en algún caso. Durante su época de venta como vehículo nuevo (entre 2009 y 2011) su precio base iniciaba su andadura en algo más de 93.000 euros. Un coste elevado para un coche con una tecnología que apenas era conocida en el mundo.
Si observamos las diferentes webs de anuncios de coches de segunda mano, veremos que en toda Europa apenas existen contadas unidades a la venta con un precio de partida de 90.000 euros para uno de los coches con casi de 140.000 kilómetros en su odómetro. Es decir, después de tantos kilómetros y más de una decena de años sobre él, este coche ha sabido mantener intacto su precio inicial. Una inversión plena, aunque este no es el mejor de los casos. La unidad con el precio más elevado, está ubicada en tierras austríacas y se presenta por un coste de algo más de 133.000 euros con un recorrido total de 57.000 kilómetros. Es decir, 40.000 euros por encima del precio de venta inicial del modelo nuevo a pesar de su prolongado uso.
Si echamos un vistazo al mercado norteamericano en busca de nuevas esperanzas para adquirir uno de estos descapotables eléctricos, mejor será que desistamos en nuestros propósitos, ya que allí se pueden ver anuncios incluso más disparados, con precios situados entre los 120.000 y los 180.000 dólares sobre unidades con un notable uso sobre su mecánica.
Pero, ¿a qué se debe exactamente esta enorme burbuja que se ha creado alrededor del Tesla Roadster? En primer lugar, por su baja producción, la cual no pasó de 2.400 unidades, un detalle que podría no ser necesariamente importante si Tesla no hubiese alcanzado, con el paso de los años, el estatus empresarial que ha logrado. Los productos y la tecnología que ha presentado la marca a lo largo de esta década ha supuesto todo un revulsivo para el mercado de los coches eléctricos, poniendo contra las cuerdas a más de una de las marcas que ya estaban bien asentadas en el mercado.
El Tesla Roadster, especialmente, ha visto incrementada su cotización en el mercado de segunda mano durante los últimos dos años, ya que ha sido cuando la firma americana ha visto cómo han subido sus acciones en Bolsa e incrementado todas sus posiciones mercantiles con nuevos modelos y fábricas sobre nuevos puntos por los principales mercados. En los próximos años darán luz verde a la fabricación de un nuevo Tesla Roadster con unas capacidades mejoradas y con una estética más acorde a las líneas maestras que presenta a día de hoy la marca norteamericana.