La razón por fin se impone en los despachos de Tesla. Los americanos han querido reinventar el concepto clásico de volante, aunque la jugada no les ha salido como ellos querían. El yugo ha sido durante mucho tiempo uno de los temas más comentados de la nueva generación de los Tesla Model S y Model X. Con opiniones enfrentadas, Tesla por fin permite que sean los usuarios los que decidan qué tipo de volante incluir en sus flamantes coches, además de dar opción a los usuarios actuales a actualizar el formato. Eso sí, por un módico precio.
El volante de los coches es redondo no sólo por una mera cuestión de tradición, sino también de seguridad y ergonomía. Tras haberse analizado miles de formatos diferentes, la forma circular permite al conductor un manejo más sencillo, rápido e intuitivo. Los hay más grandes o más pequeños, más finos o más anchos e, incluso, cada vez más se opta por achatarlo en la parte inferior. Aun así la forma se debe, principalmente, a una cuestión de seguridad.
El problema con el volante yugo de Tesla es que la desmultiplicación de la dirección afecta seriamente al manejo a baja velocidad. Maniobras tan comunes como aparcar o desaparcar, girar en una calle estrecha o tomar una rotonda, se complican por no disponer de la parte superior del aro. Resulta inseguro en recuperaciones rápidas a escasa velocidad, ya que son dos vueltas y media las que hay que dar para llegar a los extremos de la dirección. En carreteras rápidas es mucho más natural, aunque la posición de las manos es excesivamente baja en caso de accidente.
A la hora de configurar un nuevo Model S, podemos ver claramente cómo el configurador permite seleccionar dos opciones sin coste alguno incluso en la versión Plaid. Aunque el volante mantiene los mandos dentro de los radios, el hecho de ser redondo mejora mucho la usabilidad y la seguridad. Este beneficio no es exclusivo para nuevos clientes ya que inmediatamente Tesla ha empezado a ofrecer una actualización en los modelos ya vendidos, aunque en ese caso sí tendrán que pasar por caja. Por el módico precio de 700 euros,Tesla te instala un volante redondo. No es un coste despreciable, pero es menor que las opciones aftermarket que había actualmente.
Tesla no ha sido la única en ofrecer un volante de este tipo, aunque sí la primera. En unos meses llegará al mercado el Lexus RZ. Un SUV eléctrico con el mismo volante estilo yugo. Sin embargo, en esa ocasión, Lexus ha limitado el giro del volante a 150 grados, lo que reduce significativamente el cruce de manos, aunque todavía queda por ver cómo responderá en otros entornos. A pesar de ello, los japoneses también ofrecerán una dirección tradicional para aquellos que no quieran el formato yugo.