Dicen que los alemanes inventaron el coche, pero que fueron los franceses los que lo mejoraron y le dieron estilo. Sea como sea, está claro que los franceses tienen un estilo muy particular a la hora de crear sus automóviles. Son expertos en las categorías inferiores, en los segmentos A y B, donde siempre han mostrado aptitudes muy superiores a las de sus rivales. Hoy, todavía sigue siendo así como bien lo demuestra Renault en sus últimos lanzamientos. Los parisinos están dando mucho de qué hablar con sus nuevas propuestas eléctricas. Tienen mucho de lo que presumir, pero curiosamente se centran en un detalle.
Tras la llegada de Luca de Meo al despacho general de Renault, la marca del rombo ha cambiado su rumbo, enfocándose en productos mejor acabados, más atractivos y en una gama eléctrica ampliada. Para los coches impulsados por baterías Renault ha optado por un estilo retrofit. Un estilo del pasado con tintes modernos. El Renault 5 ha causado un gran revuelo en las calles principalmente por su icónico estilo. El Renault 4 ha tratado de seguir el mismo camino, pero en este caso hay que reconocer que se parece bastante menos al original.
Europa controla cada detalle de diseño, incluyendo el tamaño del logo
Aún así está cubierto de detalles chulos y con cierta esencia pasada. Un diseño muy interesante encapsulado en sus 4,14 metros de largo. Sin duda alguna el Renault 4 destacará entre el tráfico por su diseño y por las múltiples opciones de personalización que los franceses han preparado. Costará ver dos Renault 4 iguales, pero todos ellos llamarán la atención. Entre los muchos detallitos que se reparten por el interior y la carrocería, Renault está muy orgulloso de uno en especial, la parrilla. Una parrilla iluminada por los bordes y que, por primera vez, incluye el logotipo iluminado. En Renault lo consideran una gran “innovación”.
La verdad es que no es ni la primera ni la segunda de las insignias que se iluminan en la actualidad. Volkswagen también la ha introducido ahora en sus modelos de mayor volumen, aunque el efecto está condicionado a la elección de un equipamiento opcional. Renault sigue haciendo referencia al Renault 4 original para avivar la nostalgia de la gente, diciendo que sus faros redondos y la parrilla del radiador rectangular le daban un aspecto muy específico, como una expresión facial. Y, por supuesto, la compañía está tratando de hacer algo similar, aunque no 100% idéntico, para el 4 EV.
La Unión Europea ya no permite usar elementos cromados en los coches nuevos por cuestiones medioambientales. Las marcas buscan soluciones para reemplazarlo, pues el cromo siempre ha sido sinónimo de elegancia. Europa regula incluso el tamaño del logo. Como máximo debe tener una superficie de 100 centímetros cuadrados. Una cifra que parece aleatoria y que es un signo más de la extrema legislación a la que tienen que enfrentarse los fabricantes ante cada nuevo desarrollo. A pesar de ello, las limitaciones han despertado la creatividad de Renault, que si bien no ha sido la primera en crear un logo iluminado sí que está tremendamente orgullosa de su trabajo.
