En 2021, Toyota anunció una ambiciosa transición hacia la movilidad eléctrica, marcando un cambio significativo para la marca líder en el mercado de vehículos híbridos. Su objetivo para 2025 era introducir 70 nuevos modelos electrificados, de los cuales 15 serán completamente eléctricos, con la meta de alcanzar un 7% de la cuota de mercado en vehículos eléctricos.
Desde aquel anuncio, Toyota ha lanzado modelos como el bZ4X, un SUV eléctrico de dimensiones similares al RAV4, disponible a nivel mundial aunque ha sido recibido con moderación por los mercados. Además, presentó el bZ3, una berlina eléctrica desarrollada en colaboración con BYD que actualmente se comercializa solo en China. Para 2024, Toyota tiene previsto el lanzamiento del bZ3X, un SUV eléctrico más compacto, y en 2025 llegará un tercer SUV urbano eléctrico que se posicionará como complemento ideal de los modelos híbridos Yaris Cross y Aygo X Cross.
Socios japoneses para fabricar los coches eléctricos
En esta estrategia, Toyota ha optado por asociarse con Suzuki para desarrollar su próximo 4x4 eléctrico, una colaboración que refuerza la sinergia continua entre ambas compañías. Esta alianza, iniciada en 2016 y diferente a la realizada con Subaru para el bZ4X y el Solterra, permite a Toyota y Suzuki aprovechar fortalezas compartidas, como ya han hecho en otros proyectos en los que se han lanzado versiones adaptadas de modelos reconocidos como el Corolla y el RAV4 (denominados Swace y Across en determinados mercados europeos).
Los dos fabricantes japoneses colaborarán para lanzar este primer vehículo todoterreno eléctrico que se ensamblará en las instalaciones de Suzuki en India, país que será el mercado principal, aunque las empresas buscan expandir su comercialización a nivel global.
No hay por ahora detalles sobre este modelo, salvo que su diseño responde a una arquitectura específicamente eléctrica que ofrecerá un gran rendimiento y mucha autonomía, aunque por el momento no se han compartido detalles técnicos adicionales.
Toshihiro Suzuki, presidente de Suzuki, señaló la importancia de esta alianza para avanzar hacia la neutralidad de carbono, destacando que, a pesar de ser competidores, esta colaboración es clave para cumplir con objetivos de sostenibilidad. Koji Sato, presidente de Toyota, añadió que esta sinergia en fabricación e innovación ayudará a ambas marcas a ofrecer alternativas de movilidad más ecológicas, promoviendo a su vez una competencia sana y un aprendizaje mutuo de fortalezas.
La estrategia de colaboración a nivel global
La alianza entre estos dos gigantes de la industria automotriz comenzó formalmente en 2016, impulsada por los entonces líderes de ambas firmas, Osamu Suzuki y Akio Toyoda, quienes sentaron las bases para futuras asociaciones. Gracias a esta colaboración, han lanzado varios modelos en mercados clave como Japón, India, y diferentes regiones de Europa y África, contribuyendo significativamente a las ventas de ambas compañías.
Además, Suzuki y Toyota han implementado una estrategia de fabricación compartida en la India, donde Maruti Suzuki produce modelos como el Baleno y el Brezza, que Toyota adapta y comercializa bajo su marca. Esta colaboración no solo ha permitido a ambas empresas diversificar sus líneas de productos, sino también consolidar su presencia en mercados de gran demanda.
En el futuro, la producción del nuevo SUV eléctrico de Suzuki en colaboración con Toyota refuerza la ambición de ambas marcas por ofrecer soluciones de movilidad sustentable a nivel mundial.