Aunque en España todos relacionamos la marca Toyota con coches híbridos 'autorrecargables' –aquellos que no se pueden conectar a al red para recargar electricidad–, el futuro de la marca japonesa pasa por electrificar completamente su gama de productos a nivel internacional, tal y como anunció el pasado mes de diciembre, con el lanzamiento de diez modelos eléctricos a batería de aquí a 2020. Y lo hará empezando por China, donde ha confirmado durante el Salón de Pekín que el exitoso SUV compacto CH-R, el cual en España únicamente está disponible con un propulsor híbrido, pasará a ser eléctrico en el país oriental.
Toyota prepara para China un CH-R eléctrico que se venderá únicamente en el mercado local a partir de 2020, precisamente la fecha para la que teníamos prevista la llegada de una nueva generación de coches eléctricos del fabricante japonés. Antes que el Toyota CH-R eléctrico llegarán dos nuevos coches híbridos enchufables, el Corolla y el Levin, sendas berlinas específicas del mercado chino. El gran detonante de esta aceleración en la electrificación de su producto reside en el incremento de las exigencias por parte del gobierno chino para acceder a las ayudas del coche eléctrico "de nueva energía", las cuales dejarán fuera los híbridos convencionales y solamente incluyen los enchufables con mayor autonomía eléctrica.
Aunque el fabricante todavía no ha revelado los detalles técnicos, se espera que los híbridos enchufables de Toyota ronden los 50 kilómetros de autonomía en modo eléctrico. Con el objetivo de electrificar la mayor parte de su producto, Toyota se ha preparado en los últimos tiempos para fabricar internamente tanto los motores eléctricos como las baterías y los inversiones de sus próximos coches híbridos enchufables para el mercado chino, donde el último año la marca vendió 140.000 modelos enchufables. Esta cifra representa el 40% de todos los coches electrificados que el fabricante japonés ha vendido en China hasta la fecha.
Con el fin de satisfacer la creciente demanda de coches híbridos enchufables, Toyota planea elevar su capacidad productiva de módulos de baterías de hidruro de níquel-metal a 220.000 unidades de aquí a 2020. Además de esto, abrirá nuevas instalaciones de investigación y pruebas con coches eléctricos en Japón y se encuentra desarrollando en la actualidad una tecnología que le permitirá fabricar baterías de estado sólido, con las que espera ofrecer coches eléctricos con mucha más autonomía a partir de la próxima década.