Toyota ha querido hacer más visible la tecnología de la pila de combustible de hidrógeno con la presentación de un Mirai exclusivo. Se trata de una réplica a escala que en este caso puede controlarse por radio control y que está propulsado por un sistema de pila de combustible de hidrógeno, también a escala. Por ahora, esta unidad exclusiva no está a la venta y tan solo pretende mostrar lo que esta tecnología es capaz de hacer, ya que duplica la autonomía media de los coches de radio control convencionales.
Mientras que es cada vez más habitual que los coches reales se muevan con electricidad, los que lo hacen gracias a una pila de hidrógeno son poco habituales. Pues en el mundo de los coches de radiocontrol esta tecnología es completamente inédita. Toyota ha querido ser pionero en ella con este Mirai a escala producto de su asociación con Tamiya, una marca japonesa muy conocida de miniaturas y Bramble Energy, un especialista inglés en pilas de combustible.
La pila de combustible de hidrógeno del Toyota Mirai de radiocontrol ha sido desarrollada por Bramble Energy.
El Toyota Mirai de radio control se basa en el chasis de un Tamiya TT-02 sobre el que el fabricante japonés monta varios de sus modelos deportivos con tracción a las cuatro ruedas. Por lo tanto este Mirai a escala supera en este aspecto a su hermano mayor, que solo está disponible con tracción trasera. Debajo de su carrocería está equipado con un sistema de pila de combustible miniaturizado por Bramble Energy. El coche, que está fabricado a escala 1:10, cuenta con un motor eléctrico capaz de desarrollar hasta 20 W de potencia, capaz de moverlo con soltura por la maqueta que Toyota ha preparado para rodar un pequeño vídeo en el que lo muestra moviéndose por un mundo también a escala.
Toyota ha querido resaltar que este Mirai es capaz de ofrecer el doble de autonomía que un coche de radio control eléctrico de características similares. Una característica que debería atraer a los aficionados a esta disciplina que, a menudo, cuando se trata de coches eléctricos, se ven decepcionados por el poco tiempo que pueden disfrutar de la conducción y el largo periodo de tiempo que hay que esperar para recuperar la capacidad de la batería. Desafortunadamente, se trata de una unidad única que por ahora permanecerá como un prototipo y no se pondrá a la venta.
Aprovechando estas especificaciones, Toyota recuerda que el Mirai logró romper en junio el récord del mundo de la distancia recorrida por un automóvil propulsado por hidrógeno. Un modelo de producción sin ningún tipo de variación respecto al que está a la venta fue capaz de recorrer 1.003 kilómetros con una única carga (de hidrógeno verde) en sus tres tanques de combustible. Poco después, en agosto, Toyota inscribió al Mirai en el libro Guinness de los Récords gracias a una prueba de autonomía que le ha llevado a superar la barrera de las 845 millas, 1360 kilómetros en California.