Casi de la nada Toyota nos sorprende con el lanzamiento de un nuevo coche eléctrico, el segundo en suelo europeo. Se llama Toyota Urban Cruiser y con su llegada los japoneses ponen el foco de atención en el segmento B-SUV. Toyota quiere demostrar así que se toma muy en serio la electrificación de su flota. La familia bZ da la bienvenida a una nueva unidad, aunque resulta curioso que ésta no emplea la misma nomenclatura que la de su hermano mayor, el Toyota bZ4X. Se espera que su llegada a los concesionarios se produzca a mediados del próximo año. El precio es, por el momento, totalmente desconocido, aunque sí podemos hacernos una idea aproximada.
Si sigues la actualidad de la industria sabrás que hace justo un año que Toyota expuso un coche conceptual, un prototipo al que bautizó como Toyota Urban SUV Concept. Aquél prototipo fue la antesala de lo que hoy conocemos como Urban Cruiser. Un nombre que Toyota lleva usando desde hace mucho tiempo. La denominación Urban Cruiser se ha asociado con diferentes modelos, desde la India a Estados Unidos, pasando por Europa. Considerado como uno de los primeros monovolúmenes urbanos, no siempre ha tenido el éxito esperado. Hace más de una década que no lo veíamos por el Viejo Continente.
Su precio de venta podría ser inferior a los 30.000 euros, antes de ayudas
Ahora vuelve y lo hace convertido en un SUV eléctrico de pequeño tamaño. Sus medidas exteriores son: 4,28 metros de largo, 1,80 metros de ancho (sin retrovisores) y 1,64 metros de alto para una distancia entre ejes de 2,7 metros. Es apenas unos centímetros más grande que el Toyota Yaris Cross y apenas unos centímetros más pequeño que el Toyota C-HR. Las proporciones lo sitúan en el segmento de los B-SUV, donde la apuesta eléctrica se ha intensificado en los últimos meses. Sus principales enemigos serán el Hyundai KONA eléctrico y el KIA EV3. Similares en cuanto a tamaño y, supuestamente, precio.
De puertas para dentro el Urban Cruiser presenta una configuración muy habitual al estilo de Toyota. En la parte delantera se destaca la presencia de dos grandes pantallas. La instrumentación con 10,25 pulgadas y la principal, la del sistema multimedia, con 10,1 pulgadas. A través de ella se gestionan casi todas las funciones del vehículo, además de incluir tecnologías inalámbricas para la conexión con teléfonos móviles. No faltan los asistentes a la conducción ni los elementos de seguridad activa y pasiva, como la cámara de 360 grados. En cuanto a espacio, la larga batalla permite anticipar una buena habitabilidad para los pasajeros traseros. Toyota no ha comunicado el volumen del maletero, pero sí la disposición trasera de los asientos, fragmentados en una proporción 40:20:40, y con ajuste longitudinal.
En lo relativo al apartado mecánico, Toyota ha apostado por una configuración completamente nueva. Habrá disponibles varias configuraciones mecánicas con uno o dos motores. Hay tres niveles de potencia: 144, 174 y 184 caballos, según la versión. También será posible escoger entre diferentes tamaños de batería, siempre con química LFP. El modelo de acceso ofrece una pila con 49 kWh de capacidad, mientras que la versión superior alcanza los 61 kWh. Por el momento los japoneses no han confirmado los datos relativos a la autonomía, aunque se espera que en el mejor de los casos el rango homologado supere ampliamente la barrera de los 400 kilómetros. El Urban Cruiser se asienta sobre una plataforma propia no derivada de la actual e-TNGA.
Como ya hemos dicho, el Toyota Urban Cruiser eléctrico estará disponible en Europa a mediados del próximo año. Antes de esa fecha se podrá ver en el Salón del Automóvil de Bruselas de 2025, que abrirá sus puertas entre los días 10 y 19 de enero. Por último, Toyota no ha querido aclarar nada en cuestión de precios, pero si tomamos como referencia sus características mecánicas, principalmente su batería LFP, así como las tarifas de sus rivales, es lógico pensar que estamos ante el Toyota eléctrico más barato de todos. El EV3 de KIA tiene un precio mínimo de 33.600 euros, mientras que el KONA eléctrico no baja de los 37.000 euros, antes de ayudas y promociones en ambos casos. Esto nos lleva a pensar que el Urban Cruiser puede costar menos de 30.000 euros sin tener en cuenta descuentos y ayudas del Plan MOVES III.