El accionamiento eléctrico AMT e-Drive es la primera caja de cambios de dos velocidades para vehículos eléctricos desarrollado por la empresa belga BMT. El concepto, listo para su industrialización, es un accionamiento eléctrico capaz de generar un par de salida de hasta 9.000 Nm, adecuado para furgonetas eléctricas y para vehículos comerciales ligeros.
BMT Drive Solutions es proveedor de nivel 2 de la automoción que factura sus productos bajo la marca VCST. Su línea de negocio se basa sobre todo en la producción en masa de engranajes y ejes para los principales fabricantes de automóviles del mundo. Entre sus clientes están grupos automovilísticos tan importantes como Volkswagen, Ford, Porsche, DAF o Cummins. Cada año, de sus instalaciones salen entre 20.000 y 2 millones de piezas.
Según BMT, las transmisiones eléctricas de múltiples velocidades se convertirán en tendencia entre las tecnologías de tren de potencia en la próxima década, permitiendo la reducción y el ahorro de costes tanto en el motor eléctrico como en el inversor asociados a ellas.
La primera transmisión eléctrica diseñada por BMT, y que se comercializará bajo el nombre de AMT e-Drive, es capaz de ofrecer en sus dos marchas, un par máximo de hasta 9.000 Nm. La primera velocidad es la adecuada para realizar el arranque desde parado del vehículo, mientras que la segunda es capaz de propulsarlo hasta las velocidades máximas que se pueden alcanzar en la autopista.
Los eventos de cambio son controlados eléctricamente por un sistema de embrague 'dog clutch', una tipología de este mecanismo que acopla los ejes giratorios no por fricción, sino por interferencia o ajuste de holgura. Según el fabricante, se esta forma pueden garantizar un funcionamiento suave y rápido, ya que los tiempos de cambio son de 0,2 a 0,5 segundos.
Control de calidad: cero ruidos en el habitáculo
Las partes móviles de un motor, cuando se encuentran en funcionamiento, producen una serie de ruidos que pueden escucharse tanto en el exterior como en el interior del habitáculo. Para garantizar los niveles de confort requeridos, la microgeometría de los engranajes ha de estar cuidada con precisión. Este es uno de los principales objetivos de los fabricantes, interesados en mantener estos niveles de ruido bajo el umbral requerido, siendo esta una de las principales características subjetivas de calidad observadas por los ocupantes del vehículo.
Desde hace 30 años, la empresa belga centra su línea de negocio en la fabricación de conjuntos de engranajes de distribución o sistemas de ejes de equilibrado para motores de combustión interna. La tendencia a la electrificación ha variado su estrategia para centrarla en la fabricación de piezas complejas para el cajas de cambios de vehículos eléctricos. Para ello, su experiencia en la fabricación de engranajes, tanto en el debastado, o limpieza de asperezas, como en el brochado o tallado de sus dientes. Combina líneas de tratamiento térmico (cementación, nitruración y endurecimiento por inducción) y procesos de acabado (bruñido, rectificado).