Schaeffler ha comenzado la producción de las transmisiones para el sistema de tracción eléctrica del Audi e-tron, que tiene previstas sus primeras entregas antes de que finalice 2018. Gracias a este componente se obtiene el máximo rendimiento de sus tres motores eléctricos proporcionando tracción a las cuatro ruedas y manteniendo un alto nivel de confort y un mínimo nivel de ruido en el interior del habitáculo.
La transmisión diseñada por Schaeffler utiliza un sistema de accionamiento eléctrico en cada eje siguiendo los requisitos mecánicos y de disponibilidad de espacio solicitados por Audi. Será producida en las plantas de Herzogenaurach y Bühl. Según el fabricante, este sistema debe garantizar una conducción cómoda tanto en entornos urbanos como en condiciones de conducción deportiva en las que se precisan altas aceleraciones.
Según Jochen Schröder, jefe de la división de negocios de E-Mobility de Schaeffler, "las dos transmisiones comenzaron a producirse en agosto. Esperamos un volumen de producción de hasta 250.000 unidades por año. Gracias a la modularidad de nuestros productos, podemos adaptar la transmisión a otras aplicaciones". Esta cifra supone que Audi, en un futuro, tiene la posibilidad de ensamblar hasta 125.000 unidades del e-tron cada año, ya que cada uno de ellas utiliza dos transmisiones.
Ofrece dos versiones diferentes, diseñadas para cada uno de los ejes. La variante en disposición coaxial proporciona tracción trasera, mientras que la variante paralela se monta en el eje delantero, habilitando la tracción en todas las ruedas. El núcleo de todo el sistema es el conjunto de engranajes planetarios altamente integrado y también desarrollado por Schaeffler.
Transmisiones de Schaeffler para el Audi e-tron. A la izquierda, transmisión coaxial para el eje trasero, a la derecha, transmisión paralela para el eje delantero.
Cuando el Audi e-tron circula con exigencias de potencia bajas, en el tráfico habitual, el accionamiento se realiza a través del eje trasero. Si se requiere mayor potencia, se pone en marcha la transmisión delantera en paralelo.
Un conjunto de engranajes planetarios escalonados altamente integrados actúa como núcleo de todo el sistema combinado con un innovador diferencial de engranaje recto. Se aplica tanto en la variante de transmisión coaxial como en la paralela, lo que ha reducido el tiempo de desarrollo y los costes de producción y ha permitido optimizar la calidad del producto.
Con tan solo 150 milímetros de diámetro y 16 kilogramos de peso, el sistema ofrece un par de entrada de 400 Nm y puede combinarse con un bloqueo de estacionamiento opcional. La potencia de salida del motor es de 265 kW (355 CV) y 561 Nm en el modo Performance y hasta 300 kW (402 CV) en el modo Boost con 664 Nm, que distribuye 135 kW delante y 165 kW atrás.