Twitter lleva siendo durante mucho tiempo el altavoz de Donald Trump. El presidente estadounidense no suele dejar títere con cabeza en sus comentarios en la red social, aunque esta vez sus palabras resultan amables. El mandatario norteamericano anunció a través de su cuenta personal que el Gobierno chino ha aceptado "reducir" y "eliminar" los aranceles que impone a los vehículos procedentes de EEUU, que actualmente tienen una carga impositiva del 40%.
China has agreed to reduce and remove tariffs on cars coming into China from the U.S. Currently the tariff is 40%.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 3 de diciembre de 2018
"Estamos llegando a acuerdos de gran magnitud, China tiene mucho que ganar si se completa un acuerdo", aseguró Trump en uno de los cinco tuits publicados en referencia al gigante asiático. El magnate norteamericano se ha comprometido también a no subir los aranceles a las importaciones chinas del 10% al 25% a partir del 1 de enero del próximo año.
China ya redujo el pasado julio las tarifas a la importación de vehículos del 25% al 15%. Sin embargo, no frenó el intercambio de golpes con EEUU, lo que provocó que en los últimos meses haya habido un repunte de la tensión entre ambos países. De hecho, Pekín le impuso una tasa adicional del 25% a los automóviles estadounidenses hasta alcanzar el 40% mencionado por Trump.
President Xi and I have a very strong and personal relationship. He and I are the only two people that can bring about massive and very positive change, on trade and far beyond, between our two great Nations. A solution for North Korea is a great thing for China and ALL!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 3 de diciembre de 2018
Fin de las ayudas a eléctricos
La Casa Blanca quiere poner fin a las ayudas a los vehículos eléctricos. Así lo advirtió ayer Larry Kudlow, asesor de la Administración Trump. Y no solo quiere acabar con los incentivos a la compra de eléctricos, sino también a "otros subsidios a energías renovables que se impusieron durante el gobierno de Obama", según explicó el analista, conocido por sus intervenciones en diversos medios de EEUU.
Las subvenciones estatales del Gobierno estadounidense oscilan entre 2.500 y 7.500 dólares –entre 2.200 y 6.600 euros– y están destinadas a los fabricantes que no hayan sobrepasado 200.000 unidades de coches eléctricos producidos. Kudlow apuntó los años "2020 o 2021" como la fecha en la que terminarían de concederse estas ayudas. Marcas como Tesla, que sobrepasó el tope el pasado julio, ya han visto cómo les retiraban los subsidios gubernamentales. El propio Trump amenazó recientemente a General Motors, la mayor compañía de la automoción estadounidense, con la retirada de las ayudas, "incluyendo los eléctricos", tras el anuncio por parte de la firma del cierre de cinco fábricas en EEUU.