La Unión Europea ha propuesto recientemente establecer en todo su territorio una rebaja en los peajes por circulación a los coches eléctricos, una medida que ya se encuentra vigente en ciertos estados miembros pero que en los próximos años pasaría a ser unánime, según un informe publicado por Green Car Congress.
Sin embargo, esto no supondrá una obligación para los estados miembros de instalar una serie de peajes en su red de carreteras sino que, si deciden hacerlo, deberán atenerse a las normas aprobadas en el Parlamento Europeo. En este nuevo acuerdo se estableció la normativa de tarificación que los propios países podrán imponer a camiones, autobuses, furgonetas y, por supuesto, los turismos. Todos los vehículos podrán disfrutar de un descuento si estos presentan una validación como automóvil eléctrico o de bajas emisiones.
Actualmente, en ciertas carreteras europeas, el sistema de tarificación vial se basa en el tiempo de uso, sin embargo, este nuevo método trasladará casi toda la red hacia un sistema de cobro basado en la distancia o en los kilómetros recorridos, ya que esto supondrá un mejor reflejo del principio de "quien contamina paga". Esto tendrá lugar sobre todas las carreteras RTE-T (Red Transeuropea de Transporte), pero no será de obligada instauración. En España, la práctica totalidad de vías de alta velocidad se acogen a este criterio, aunque en nuestro país contamos con una red de carreteras sin peajes en su mayoría.
En la red de carreteras donde están instauradas las famosas "viñetas" para vehículos pesados, irán dando paso paulatinamente a nuevos sistemas de peaje. El modelo actual está basado en el tiempo de uso, particularmente para vehículos pesados (autobuses y camiones), mientras que en un plazo estimado de ocho años después de la entrada en vigor de las nuevas reglas será cuando comenzarán a aplicar la nueva serie de peajes basados en la distancia o kilómetros recorridos. No obstante, aunque un sistema de cobro tienda a desplazar a otro, los estados miembros podrán seguir contando con el mecanismo de las viñetas para partes específica de esta red, siempre y cuando puedan demostrar que el nuevo modo de cobro sería desproporcionado.
Pero el gobierno europeo ha planteado un incentivo con el que fomentar la adquisición y el uso de vehículos más respetuosos con el medio ambiente, pues los modelos que posean bajos o nulos niveles de emisiones de CO2 poseerán unas tarifas diferenciadas. Este sistema comenzará a imponerse a partir de 2026; recordemos que un año antes se espera que se instaure la nueva normativa Euro 7, por la que la electrificación tomará casi todo el protagonismo en los vehículos.
Los países de la UE que deseen cobrar a los vehículos más ligeros, como turismos, furgonetas o minibuses, podrán elegir entre el sistema de peaje o viñetas; en caso de emplear este último, estos pagos deberán ser válidos por períodos más cortos (un día, una semana o 10 días) y deberán ser igualitarios para todos los conductores que ocasionalmente empleen la red de autopista de otro país europeo.
A través de este sistema de pagos, los eurodiputados han propuesto que estos ingresos sean empleados directamente en mejoras al sistema de transporte, sus infraestructuras y en apoyo a la movilidad sostenible. Una vez entre en vigor esta medida, todos los estados que se acojan a ella deberán informar públicamente sobre cuánto se ha recaudado a través de esto y a dónde han ido dirigidos sus correspondientes montantes económicos, en favor de una mayor transparencia gubernamental y monetaria.
