La llegada del coche eléctrico ha despertado el interés de muchos países y marcas. Cada vez son más las compañías que se lanzan a la aventura de diseñar, desarrollar y producir coches impulsados por baterías. Sin embargo, la competitividad del mercado devora incluso a las marcas mejor respaldadas. Los problemas económicos son el día a día de muchas startups como VinFast. El mayor fabricante de automóviles de Vietnam atraviesa su etapa más complicada mientras que intenta salir a flote expandiéndose a diferentes mercados. La llegada a Europa está cada vez más comprometida ante la espantada de los inversores. Cinco iban a ser los modelos que llegasen a nuestro mercado.
VinFast es una de las muchas nuevas compañías fundadas en torno a la movilidad eléctrica. Su fundador, Pham Nhat Vuong, la creó en 2017. Desde su sede en Hanói, Vietnam, forma parte de una estructura empresarial mucho más grande, Vingroup, una de las compañías más grandes de todo el sudeste asiático, principalmente enfocado al sector inmobiliario. Durante estos años, VinFast se ha asociado con grandes nombres de la industria del automóvil, como Pininfarina. La mítica casa italiana se ha encargado de diseñar los primeros coches de la empresa. España también ha centrado la atención de los vietnamitas. En 2018 VinFast compró el 51% de la tecnológica BQ.
Desde su salida a bolsa, VinFast ha perdido casi un 60% de su valor
Si bien la sede está en Hanói, VisFast ensambla sus coches en una fábrica de reciente construcción localizada en Hài Phòng. Desde allí exporta los vehículos a diferentes mercados, entre ellos Estados Unidos. Europa también ha recibido la visita de los vietnamitas, principalmente Alemania, en Frankfurt, donde está ubicada la sede europea. También ha intentado establecerse en otras regiones como en China y Corea del Sur, aunque en ninguno de los escenarios ha cosechado buenos registros. Los malos resultados presionan cada vez más a la empresa.
Los inversores se alejan cada vez más de la empresa mientras que el precio de las acciones registran mínimos históricos. Los problemas se intensificaron a finales del año pasado cuando la agencia de calificación Moody’s calificó de “basura” la deuda de la matriz VinGroup, que se está viendo seriamente afectada por los malos resultados de la división de automóviles. "Vingroup podría enfrentarse una mayor erosión financiera" si el desempeño de VinFast no mejora. “Reducir el apoyo de Vingroup a las empresas subsidiarias podría mitigar la tensión financiera”. No parece que haya muchas salidas para el fabricante vietnamita con mayor proyección internacional.
A pesar de la complicada situación que atraviesa la empresa, VinGroup no se da por vencido con VinFast. Desde la sede de la compañía han asegurado que la matriz seguirá apoyando el desarrollo de su filial. Desde la salida a bolsa, VinFast ha perdido casi un 60% de su valor. El mayor inversor de Corea del Sur, SK Group, planea vender una quinta parte de su participación del 6% como plan de desinversión. VinFast perdió casi 2.000 millones de dólares en los primeros tres trimestres del año pasado. Según muestran los últimos datos está reduciendo sus pérdidas a medida que los ingresos crecieron gracias a que las ventas de automóviles superaron su objetivo revisado a la baja el año pasado.