La producción y desarrollo de coches eléctricos o con algún tipo de electrificación no va a cesar, de hecho, el plan de Volkswagen consiste en aumentar considerablemente su gama en los próximos años. Para encarar el desafío que supone la fabricación de estos vehículos, principalmente de cara a la propia mecánica eléctrica, la firma alemana ha decidido invertir un total de 70 millones de euros en el lanzamiento de un nuevo centro de I+D para la producción a gran escala de sus propias celdas de baterías.
Este centro se ha construido al noroeste de Baja Sajonia, más concretamente en la ciudad de Salzgitter. Allí han enviado una importante inversión que supondrá, a la larga, un posible alivio económico para Volkswagen, ya que gracias a esta nueva instalación, donde se fabricarán sus propias celdas de las baterías, prescindirán de verse obligados a realizar los pedidos a otras marcas empresas externas tanto a la marca como al propio Grupo Volkswagen.
Este nuevo centro operativo fue inaugurado el pasado lunes día 13 de septiembre de la mano del propio director de tecnología y componentes de Volkswagen, Thomas Schmall. Esta será la primera instalación que, según los planes, llegará de la mano de un complejo mucho mayor en los próximos años, en los que esperan depositar una importante carga de trabajo con los vehículos eléctricos de otras marcas del Grupo.
En el apartado laboral interno, ya existe una pequeña línea de fabricación para baterías de prueba y series limitadas, esta se ha instalado en el lugar en el que, hasta no hace mucho tiempo, se fabricaban motores de combustión. Será a partir del año 2025 cuando la factoría comience a producir a gran escala sus celdas de baterías para modelos de gran volumen. Esto podrá suponer un nuevo paso en la disminución del precio final de los vehículos eléctricos, algo que la mayoría de marcas buscan sistemáticamente recurriendo a unos recursos u otros.
El área inicial de esta factoría, es de 2.500 metros cuadrados. En esta superficie, se realizarán importantes programas de pruebas de células con hasta 200 métodos analíticos diferentes, así como el desarrollo de nuevas formulaciones que puedan dotar a las propias baterías de una mayor eficiencia energética. Los trabajadores dispondrán aquí de microscopios electrónicos de barrido para la detección del litio, así como otros equipos que incluyen un campo de prueba automatizado para el rendimiento de las células o el posible nivel de desgaste de estas con el paso del tiempo a causa de las cargas, descargas y cargas rápidas. Dicho laboratorio se dividirá en cuatro áreas de trabajo: un laboratorio de desarrollo celular, un laboratorio de análisis, un laboratorio ambiental y un campo de pruebas.
Durante su inauguración, el propio Thomas Schmall, expresó su plan de construir, al menos, seis nuevas fábricas para la construcción de sus propias células de baterías en Europa. Después de finalizar la de Salzgitter, el siguiente paso será construir una nueva factoría en Skelleftea, al norte de Suecia; posteriormente llegará la tercera a la flota de factorías, la cual podría ubicarse en España, aunque esto aún no está confirmado de manera oficial.
A día de hoy, Volkswagen está asociado con Northvolt, en Suecia; con Gotion en China y con QuantumScape, ubicada en California. Como vemos, el reparto del trabajo es total, pero las miras de la firma alemana se sitúan en poder producir sus propias celdas, expandiendo sus futuras fábricas a varios países. La recién inaugurada planta de Salzgitter, tiene como objetivo producir un total de 40 GWh al año, cifra que significaría la energetización de su gama eléctrica al completo.
