En el día en el que Tesla ha confirmado que su Gigafactoría europea estará situada en Alemania, Volkswagen ha inaugurado una nueva planta de fabricación de coches eléctricos en Tennesse donde, según informa Reuters, se producirán dos modelos eléctricos de la familia ID. La nueva planta, puesta en pie junta a la ya existente en Chattanooga y que fue anunciada en enero de este mismo año, tiene previsto producir más de 50 millones de coches eléctricos en los próximos años.
El CEO del Grupo Volkswagen de América, Scott Keogh, calificó el evento de inauguración como un "momento mágico" para los vehículos eléctricos en los Estados Unidos y lo comparó con la llegada al mercado del Volkswagen Beetle, que acabó vendiendo 21 millones de unidades. Con una inversión de 800 millones de dólares, el Grupo Volkswagen espera generar en la región 1.000 nuevos puestos de empleo directos a través del que será su único centro de ensamblaje de vehículos eléctricos en los Estados Unidos. Las instalaciones de Chattanooga se convierten en una de las seis plantas de ensamblaje del grupo alemán dedicadas exclusivamente a la producción de vehículos 100% eléctricos.
La nueva planta se sitúa junta a la ya existente dedicada a la fabricación de vehículos con motor de combustión interna que actualmente cuenta con una superficie superior a 300.000 metros cuadrados y da empleo a una plantilla de 3.500 trabajadores. Cuando se anunció su construcción, se dijo que empezaría a producir sus primeros vehículos eléctricos en 2022. Todos ellos se montarán sobre la plataforma modular MEB de Volkswagen y tendrán como principal destino el mercado de los Estados Unidos.
En 2022, el primer vehículo eléctrico que se producirá en Chattanooga será el Volkswagen ID.4, conocido por ahora como ID. CROZZ. un SUV eléctrico que llegará a Europa después del ID.3, y que será el primero en llegar al mercado estadounidense el año que viene, convirtiéndose el primer vehículo eléctrico de la familia ID. que se comercializará a nivel mundial. Desde su lanzamiento a finales de 2020 y durante un año, hasta que la planta sea funcional, el ID.4 se importará desde Europa. Más adelante también se fabricará en Chattanooga el Volkswagen ID.BUZZ, un monovolumen eléctrico que también utiliza la plataforma modular eléctrica MEB.
Según Keogh, la nueva planta de vehículos eléctricos será un "espejo" de la fábrica actual siendo capaz de producir alrededor de 180.000 unidades al año a mediados de 2023. "La respuesta del mercado en relación con el precio de las baterías es clave para lograr los objetivos previstos, "creo que el momento es el correcto para obtener una reacción correcta del mercado y lograr el precio que necesitamos".
"Los EE.UU. es uno de los lugares más importantes para Volkswagen y la producción de automóviles eléctricos en Chattanooga es una parte clave de nuestra estrategia de crecimiento en América del Norte", dijo el presidente ejecutivo del grupo, Herbert Diess en enero.
La planta alemana de Zwickau, ha arrancado ya la producción del primero de los modelos eléctricos de Volkswagen. Una instalación en la que se producirán cerca de 100.000 coches eléctricos el próximo año y en la que, a partir de 2021, la cifra de producción alcanzará las 330.000 unidades anuales convirtiéndola en la planta de coches eléctricos más grande de Europa. En 2020 se sumarán las plantas chinas de Anting y Foshan y en 2022 las alemanas de Emden y Hannover.
