Vivimos tiempos convulsos. El panorama internacional no es nada favorable a nuevas y costosas inversiones. La elevada inflación de la zona euro ha disparado los costes. Los precios de las materias primas escalan sin que haya un techo visible y las tarifas de la energía están en máximos históricos. Ante esta situación Volkswagen ha tomado la dramática solución de posponer la decisión de dónde levantar la gran fábrica de baterías de Europa del Este. El anuncio se retrasará unos meses tal y como informa Reuters.
Los planes de Volkswagen para Europa son muy ambiciosos. La anterior junta directiva presidida por Herbert Diess estableció una hoja de ruta muy concreta en cuanto a lanzamientos e infraestructuras. La oferta eléctrica de todo el Grupo Volkswagen va a crecer considerablemente los próximos años, y para evitar dependencias de terceros y de otros países nada mejor que la fabricación de sus propios componentes. Sin embargo, esta estrategia es más fácil de decir que de cumplir, y lo que nadie había tenido en cuenta es el cambio de rumbo de la situación geopolítica europea.
La guerra de Ucrania ha supuesto un duro varapalo para la economía del euro. A los países les cuesta controlar la inflación por culpa de los altos precios de la energía, las materias primas y el combustible. Aunque parece que la situación se ha suavizado en los últimos meses, nadie sabe qué puede deparar el futuro. La inestabilidad se acompaña de incertidumbre, y ante esa situación Volkswagen no quiere precipitarse en un anuncio tan importante como la ubicación de la cuarta de sus seis gigafactorías de baterías planificadas para 2030.
Con dos instalaciones consolidadas: Suecia y Alemania, la tercera planta ha vivido semanas de alta inestabilidad. El pasado mes de marzo Volkswagen anunciaba oficialmente que la localidad de Sagunto albergaría la tercera de las gigafactorías de Volkswagen. Durante meses las obras del monumental proyecto siguieron adelante, pero hace unas semanas la cúpula directiva de Volkswagen anunció que podría revertir la decisión si el Gobierno central no se comprometía con las ayudas que en su día se acordaron. Los presupuestos del PERTE no cuadraban con lo prometido, y en un amago de irse finalmente el Gobierno ha garantizado 400 millones en ayudas, más una cantidad adicional en los próximos años.
Tal y como afirma Reuters, Volkswagen ha decidido que teniendo en cuenta el entorno económico actual su compañía de baterías PowerCo tomará la decisión definitiva durante el primer trimestre del año que viene. La evaluación de ubicaciones sigue en marcha, pero ninguna solución se postula como ideal. Durante mucho tiempo Skoda estuvo pujando por la tercera fábrica que finalmente se vino a España. Es bastante probable que finalmente los alemanes se decanten por la República Checa como lugar escogido, tanto por mano de obra como por conocimiento de la zona. Pronto lo sabremos,
La primera de las grandes factorías de baterías, en Suecia, empezará la producción el año que viene. Las instalaciones de Alemania harán lo propio en el año 2025, mientras que Sagunto dará el pistoletazo de salida en 2026. Los planes originales indicaban que la cuarta fábrica empezaría la actividad en 2027, pero puede que se retrase ante la incertidumbre. De las otras dos plazas no hay dato alguno, aunque sí que la última de ellas debería empezar a trabajar en 2030.