Si hay un modelo de vital importancia en la gama actual de Volkswagen, ese es el Tiguan. Es el coche más vendido de la marca alemana, por delante del Golf y el Polo, pero ya acusaba la edad y sus ventas sufrieron un notable descenso el año pasado. Ahora, la marca acaba de presentar el nuevo Volkswagen Tiguan 2024, la tercera generación de un SUV que viene con más tecnologías que nunca y versiones híbridas enchufables con autonomías eléctricas mucho mayores que antes.
Estamos ante una generación completamente nueva, así que el diseño cambia en la misma medida. El frontal adopta el estilo de los modelos ID, con faros LED muy planos, abarcando todo el ancho del capó y con una franja horizontal cubierta de cristal. Por primera vez en el Tiguan, se podrán equipar los faros matriciales IQ.Light HD.
Sin embargo, el Tiguan luce un aspecto más poderoso, con una enorme calandra delantera (solamente una pequeña parte funciona como entrada de aire) que ocupa prácticamente todo el ancho frontal por debajo de la línea del paragolpes. Esta calandra, en color negro, acaba en las aberturas de aire situadas en los laterales exteriores del paragolpes.
La vista lateral se caracteriza por unos hombros bien marcados sobre los pasos de rueda (que pueden albergar llantas de hasta 20 pulgadas). En la zaga hay una tira horizontal de LED sobre fondo negro con pilotos totalmente nuevos y un paragolpes rediseñado en el que ni siquiera se han molestado en fingir unos falsos tubos de escape: directamente no hay.
En esta nueva generación, el nombre del modelo va colocado ahora debajo de la matrícula, en lugar de encima. Una de las claves del diseño es que ahora es mucho más aerodinámico: el coeficiente de resistencia aerodinámica ha bajado de 0,33 a 0,28. Esto, lógicamente, repercute en un menor consumo de combustible.
El nuevo Tiguan ha aumentado su longitud en tres centímetros, quedando ahora en 4.539 mm de largo. La altura, la anchura y la distancia entre ejes se mantienen prácticamente idénticas a las de su predecesor, pero el espacio está mejor aprovechado: la capacidad del maletero aumenta en 37 litros, hasta los 652 (hasta la bandeja).
En el interior también encontramos un diseño totalmente nuevo, en el que destaca el cuadro de instrumentos Digital Cockpit, la enorme pantalla táctil central (de 15 pulgadas) y la ausencia de mandos/botones físicos en el salpicadero. No sólo es nueva la pantalla, también el sistema de infoentretenimiento, más rápido y con nuevas funciones. Entre las mejoras de equipamiento, el Tiguan ahora puede equipar asientos con masaje.
Como viene siendo común en sus últimos lanzamientos, la palanca de cambios está detrás del volante. El hueco donde solía estar lo ocupa ahora un botón giratorio multifunción con una pequeña pantalla OLED. Este mando permite seleccionar el modo de conducción, la iluminación ambiental y subir/bajar el volumen de la música.
Los dos únicos botones son el de arranque del vehículo y el freno de mano eléctrico. Todo lo demás se controla desde la pantalla o desde el volante, que vuelve a tener botones físicos en lugar de los erráticos controles hápticos que había anteriormente. Volkswagen también hace hincapié en que ha mejorado la calidad de los materiales empleados.
Híbrido enchufable con 100 km de autonomía eléctrica
El Tiguan de tercera generación aprovecha lo máximo que puede dar de sí la Plataforma Modular Transversal (MQB evo). Esto se traduce en la posibilidad de tener un sistema híbrido enchufable, el denominado Tiguan eHybrid.
Llevará el propulsor que ya conocimos en el nuevo Passat Variant: versiones con 204 o 272 CV de potencia y una batería de 19,7 kWh de capacidad neta que permite homologar hasta 100 kilómetros de autonomía eléctrica. Además, la carga en alterna será más rápida en todas las versiones eHybrid (pasa de 3,6 a 11 kW) y, por primera vez, se podrá cargar en corriente continua (50 kW).
También habrá versiones con motor turbodiésel (TDI), turbo de gasolina (TSI) y con hibridación suave (eTSI), que en el futuro se ofrecerán exclusivamente en combinación con la caja de cambios automática (DSG).
Volkswagen ha renovado el control de chasis adaptativo y puede equiparse con el DCC Pro con amortiguadores de dos válvulas. También está equipado de serie con el Gestor Dinámico de Marcha, un sistema que debutó en el actual Golf GTI. El sistema controla los bloqueos electrónicos del diferencial (XDS) y los amortiguadores del sistema DCC Pro. Realiza intervenciones de frenado en cada rueda y un ajuste de la dureza selectivo en cada amortiguador, de manera que el comportamiento dinámico es más neutro y estable, a la vez que más ágil cuando se necesita.
El nuevo Tiguan llegará a los concesionarios en el primer trimestre de 2024. De momento, no se conocen los precios para el mercado español. Vendrá equipado, como no podía ser de otra forma, con una buena lista de asistentes a la conducción, entre los que destacan la visualización dinámica de señales de tráfico, el Side Assist (sistema de cambio de carril) con Lane Assist (sistema de mantenimiento de carril), el Park Assist Pro con función de aparcamiento remoto y el asistente de maniobras con remolque Trailer Assist, entre otros.
