Volvo es uno de los fabricantes tradicionales que mejor lo está haciendo con la transición al vehículo eléctrico y, con una gama ya bien formada, sólo faltaba una versión totalmente eléctrica para el superventas de la marca.
El Volvo EX60 completamente eléctrico llegará el año que viene y reemplazará al actual XC60 Recharge híbrido enchufable, según adelanta AutoExpress. Un movimiento de mucha importancia para la marca sueca, pues el XC60 es su coche más exitoso: se vendieron 228.646 unidades a nivel global en 2023, seguido del XC40 con 200.670.
Siguiendo la nueva nomenclatura de la marca, la versión eléctrica no tendrá el apellido Recharge como venía ocurriendo hasta ahora, sino que empleará la fórmula EX (esto significa SUV eléctrico) seguida del número que lo identifica en la gama. Como dicta la lógica, el EX60 se situará en la gama entre el EX40 y el EX90.
El nuevo Volvo EX60 utilizará una "evolución de la plataforma" que utiliza el EX90, el buque insignia de la marca. Esto significa que podrá tener baterías de hasta 100 kWh, aunque quizá se reserve solamente a las versiones más altas de la gama. Es una capacidad superior a todos los rivales de su categoría. Hablamos del Tesla Model Y, del Audi Q6 e-tron y del BMW iX3, entre otros.
El Volvo EX60 tendrá baterías estructurales y un chasis a lo Tesla
Sin embargo, las novedades más importantes del Volvo EX60 están en su interior, concretamente en el chasis y en la batería. El EX60 será el primer Volvo con un subchasis trasero fabricado mediante fundición a presión (también conocido como megacasting), el mismo método que empezó utilizando Tesla en el Model Y y más tarde en el nuevo Model 3. También lo utilizan varias marcas chinas como Nio, Zeekr y XPeng.
Este nuevo subchasis pesa "entre un 15 y un 20 por ciento menos" que uno convencional (fabricado mediante estampación), permite tener un maletero de mayor capacidad y tarda mucho menos en producirse. Se tarda sólo 2 minutos en fabricar un subchasis mediante fundición a presión, treinta veces más rápido en comparación con la hora necesaria para uno hecho mediante estampación de muchas piezas.
La otra gran diferencia del EX60 en comparación con otros eléctricos de Volvo será su batería estructural, una tecnología que ya utilizan marcas como Tesla y BYD, que básicamente consiste en que la batería forma parte del chasis del vehículo (concretamente de su parte inferior). Esto permite, por un lado, aumentar la cantidad de celdas instaladas, lo cual se traduce en más energía disponible y mayor autonomía. Y por otro, en mayor rigidez estructural.
De momento, desconocemos qué batería (o baterías) montará el EX60. No se conoce su capacidad ni la tecnología de sus celdas y, por tanto, tampoco nada sobre su autonomía. No obstante, teniendo en cuenta la tecnología empleada y la capacidad de las baterías que puede montar, es razonable suponer autonomías superiores a los 600 kilómetros en algunas versiones.
Está previsto que el nuevo Volvo EX60 salga a la venta en 2025, coincidiendo con el inicio de la producción mediante fundición a presión por parte de Volvo. Los precios y las especificaciones al completo se confirmarán más adelante.
