Desde hace años, Volvo ha dejado bien claro cuál es su objetivo primario: volverse 100% eléctrica en el año 2030. Adelantándose a la normativa europea, los suecos siempre se han preocupado mucho por la contaminación de sus vehículos. La electrificación les ha dado fuerzas para afrontar una etapa de neutralidad que nos permitirá asistir al lanzamiento de nuevos modelos. Volvo quiere un nuevo SUV eléctrico, y piensa meterlo en la gama media, junto a unas berlinas que podrían tener los días contados.
Actualmente el 75% de las ventas de Volvo corresponden a modelos SUV. Conviene recordar que los suecos sólo ofrecen cuatro unidades todocamino: XC40, C40 Recharge, XC60 y XC90. A excepción del C40 y su planteamiento 100% eléctrico, ninguno de los otros plantea una movilidad libre de emisiones. Eso va a cambiar. La oferta comercial cambiará, y cambiarán las denominaciones que hasta ahora hemos conocido, como es el caso del Volvo Embla que llegará para sustituir al Volvo XC90. Ya se nos ha mostrado y a finales de este mismo año lo conoceremos en su formato definitivo.
Si bien la gama superior sirve como escaparate técnico y estético, Volvo sabe que en la gama media se encuentra su mayor potencial comercial. Con una versión eléctrica de acceso, el Volvo C40 Recharge, el próximo objetivo es nutrir al segmento D de un modelo 100% eléctrico para así poder plantar cara en un segmento cada vez más competido donde encontramos unidades de la talla del BMW iX3, el Tesla Model Y o el Mercedes EQC, y al que pronto se sumarán más modelos y marcas.
Para tal objetivo los suecos plantean seguir la línea comenzada con el sustituto del XC90. El Embla será toda una revolución en la casa por múltiples razones más allá del nombre. Al igual que el Polestar 2, será un modelo entre berlina y SUV. Una especie de crossover que pondrá especial atención en la aerodinámica para resultar lo más eficiente posible. Es probable que se opte primero por una línea coupé, como pasa con el C40 Recharge. Un formato nunca visto en la gama media de la casa.
Hace ya más de un año que el presidente y director ejecutivo de Volvo Car Group, Hakan Samuelsson, avisó que los nuevos eléctricos de la compañía contarían con una carrocería poco convencional enfocada en la eficiencia aerodinámica: "Deberíamos comenzar a pensar en nuevas formas de carrocería. Quiero decir que no se trata solo de sedanes y SUV. La electrificación también cambiará la forma de los coches. Creo que necesitan ser más aerodinámicos. Tal vez sorprenderemos un poco a la gente en el futuro".
Por el momento no hay mucha información al respecto, pero sí sabemos que será presentado a mitad de la década. Además de un tren motriz 100% eléctrico de última generación, Volvo contará con las baterías de última generación de Northvolt, con los que mantiene una estrecha colaboración. A eso habrá que sumar avanzada tecnología de conducción asistida y múltiples novedades en cuestión de equipamiento como un nuevo formato de integración digital con tecnología Android Automotive.