El grupo Stellantis sigue con el bombardeo de furgonetas eléctricas que están destinadas a colmar la oferta de este nicho de mercado durante los próximos años. La última de todas ellas en llegar es la versión de pasajeros de la Citroën ë-Berlingo eléctrica.
Se trata de la sexta furgoneta eléctrica compacta del consorcio franco-estadounidense y la décima si tenemos en cuenta el órdago de furgonetas de tamaño medio. Llega después de haber visto pasar por nuestra portada otras furgonetas eléctricas compactas como las Peugeot e-Partner, e-Rifter, Opel Combo-e, Opel Combo-e Life, la Toyota Proace Electric Verso y la propia versión para profesionales de la ë-Berlingo, entre otras.
Al igual que el resto de furgonetas eléctricas que ha dado a luz el extinto grupo francés (ahora forma parte de la nueva Stellantis), su arquitectura se basa en torno a la plataforma modular para coches eléctricos e-CMP. Se trata de la misma plataforma que en la que se basan otros coches eléctricos de la agrupación como el Citroën ë-C4, el Peugeot e-208 y el Opel Corsa-e, entre otros.
Lo anterior significa que la parte técnica de la ë-Berlingo queda protagonizada por el ya conocido paquete de baterías de 50 kWh de capacidad, así como su motor eléctrico situado en el capó (por lo que es tracción delantera), y cuya potencia se sitúa en 100 kW (136 CV) que en conjunto con los 260 Nm de par motor deben ofrecer una sensación de aceleración suficiente.
Cifras que hacen apta a la Citroën ë-Berlingo para alcanzar una autonomía máxima con una carga completa de 280 kilómetros en base al ciclo de homologación WLTP europeo. Las prestaciones se antojan como competentes teniendo en cuenta su condición de furgoneta, con un cero a cien kilómetros que aunque no lo declare Citroën debería ser similar al de la Combo-e y sus 11,2 segundos. La velocidad máxima queda limitada a 135 kilómetros por hora para no sacrificar la eficiencia del conjunto.
Al igual que las otras furgonetas eléctricas de PSA consta de tres modos de conducción que limitan su potencia de potencia y par para aumentar su eficiencia en el grado máximo posible. El modo Power eroga la máxima potencia para lograr las cifras mencionadas, mientras que los Normal y Eco se limitan a rendir 80 kW y 210 Nm en el caso de primero y 60 kW y 80 Nm de par motor en el caso del segundo.
La carga rápida también está presente en la ë-Berlingo. Es capaz de asumir, según Citroën, una carga "súper rápida" en una toma pública de hasta 100 kW. Esto significa que el sistema eléctrico presente en la ë-Berlingo permite reponer el 80% de la carga de la batería de 50 kWh en 30 minutos.
En la parte estética no encontramos cambios con respecto a las versiones térmicas de la ë-Berlingo. Su grupo óptico frontal dividido en dos faros es la principal seña de identidad que la diferencia del resto de furgonetas eléctricas de PSA.
Puesto de conducción de la Citroën ë- Berlingo eléctrica.
En el interior la ë-Berlingo opta por desmarcarse del característico i-Cockpit que tiene cabida en las Peugeot e-Partner y e-Rifter para dejar sitio a una disposición de volante y cuadro de mandos tradicional. Por su condición de eléctrica, por supuesto, pierde la palanca de cambios y en su lugar encontramos el selector de marchas.
Citroën comunica que también se puede a elegir entre dos longitudes de carrocería distintas: la versión corta M de 4,40 m y la versión larga XL de 4,75 m (35 cm más entre la distancia entre ejes y el voladizo trasero). La versión XL es capaz de albergar hasta siete pasajeros.
La nueva Citroën ë-Berlingo, anuncia la firma francesa, llegará a los concesionarios en el segundo semestre del presente año, y como toda la ofensiva de furgonetas eléctricas del consorcio, la ë-Berlingo es un producto “Made in Spain”, ya que es fabricada en la factoría de PSA sita en la ciudad gallega de Vigo. Una vez se inicie la producción formal de la ë-Berlingo y se aproxime la fecha de comercialización, se espera que la firma francesa revele el precio de su particular apuesta para el segmento de las furgonetas eléctricas compactas.