Hace solo unos días Mercedes-Benz anunciaba el inicio de la producción en serie de la Sprinter eléctrica, la mayor y más reciente furgoneta a baterías de la firma de Stuttgart. Mercedes ha invertido 330 millones de euros en su fábrica de Dusseldorf para adaptar la línea de producción a la nueva eSprinter eléctrica, de la que ha preferido no publicar sus objetivos de producción. Lo que sí han publicado son más datos de su nueva furgoneta eléctrica para que podamos conocer al detalle a la nueva Mercedes-Benz eSprinter.
Batería, autonomía y recarga rápida de la Mercedes-Benz eSprinter
La eSprinter es la segunda furgoneta eléctrica de Mercedes que entra a producción, después de la eVito fabricada en Vitoria (País Vasco). No obstante, la eSprinter tiene mayor capacidad de carga: hasta 1.045 kilos (con la versión de menor batería) y un volumen de carga de 10,5 metros cúbicos. El motor tiene 115 CV de potencia y 295 Nm de par, con dos opciones para la batería: 35 y 47 kWh (útiles), que ofrecen una autonomía de 115 y 168 kilómetros respectivamente.
La eSprinter se puede cargar a un máximo de 80 kW de potencia en corriente continua, gracias a la cual se puede recargar la batería del 10 al 80% en 30 minutos. Enchufada en un cargador de 7,4 kW y corriente alterna, la misma operación requiere 6 horas.
La Mercedes Sprinter eléctrica se puede cargar en 30 minutos con un cargador de 80 kW.
La batería de la Mercedes eSprinter se podrá recargar también en las frenadas, como suele ser habitual. Y como ocurre también en el Mercedes EQC, el SUV eléctrico de Mercedes, la eSprinter tendrá cuatro niveles de recuperación energética seleccionables mediante las levas situadas tras el volante.
Los cuatros modos se denominan "D-", "D", "D+" y "D++", ordenados de mayor a menor recuperación. Con el D- se puede conducir con un pedal, ya que levantando el pie del acelerador la furgoneta retendrá lo suficiente para detenerse; en el lado opuesto, con el modo D++ la eSprinter planea sin otra resistencia que el aire y la propia rodadura.
Además hay 3 modos de funcionamiento para el sistema de propulsión eléctrico: E+, E y C. El primero busca aumentar al máximo la autonomía, reduciendo por ejemplo la energía empleada por el climatizador y conteniendo la entrega de potencia del motor. En el modo C se primera el confort en cualquier caso, a costa de un mayor gasto energético y menos autonomía. Por otro lado, la velocidad máxima se puede limitar electrónicamente a 80, 100 o 120 km/h.
Un ecosistema de herramientas entorno al vehículo eléctrico para hacer la vida más cómoda a los clientes
Conscientes de que muchos clientes quizá no están todavía seguros sobre utilizar una furgoneta eléctrica para su trabajo, Mercedes ha desarrollado todo un ecosistema de herramientas y funcionalidades para hacer más fácil la transición a la movilidad eléctrica de clientes particulares y flotas, que van desde el asesoramiento personal hasta programas informáticos de costes.
Puesto de conducción de la Mercedes-Benz Sprinter eléctrica.
Por ejemplo, con las aplicaciones eVan Ready App y eCost Calculator los clientes pueden registrar todos sus movimientos durante el trabajo para, tras un periodo de prueba, comprobar si un vehículo eléctrico les resulta conveniente en su área de acción y cuánto puede ahorrar en costes de operacionales. Aplicado a flotas, incluye variables como si es posible cargar todas las furgonetas a la vez en la base, cuánta potencia se requiere y si es necesario instalar más.
Con el programa eCharging Planner se lleva a cabo un estudio personalizado a cada cliente, en el que se tienen en cuenta sus horarios de trabajo, tipo y tamaño de vehículo necesario para su trabajo, consumo estimado de energía e infraestructura de carga necesaria. Con todo esto en cuenta, se calculan los costes de inversión y operacionales y se comparan con el ahorro potencial para determinar el período de amortización.
Además, con la aplicación Mercedes PRO connect los clientes podrán programar la recarga, consultar el estado de la batería o controlar el sistema de climatización de manera remota.