Fisker aprovechó la vitrina del CES 2018 de Las Vegas para presentar su primer coche 100% eléctrico, el EMotion. El coche deportivo tiene una autonomía de 645 kilómetros, un tiempo de carga de nueve minutos y un precio de 130.000 dólares (108.000 euros).
"Estamos entrando en una nueva era por la forma en la que el mundo entiende a los vehículos, la forma en que se cargan los coches eléctricos y la potencia", comentó Henrik Fisker, presidente y CEO de la firma, durante el lanzamiento del automóvil.
El EMotion cuenta con un interior de lujo de color caramelo y negro, incluyendo los asientos de cuero premium ultra suave. El conductor cuenta con tres pantallas (la principal curvada), puertos de carga y soporte para cuatro smartphones, una consola central en fibra de carbono con espacio para almacenar tablets y otros accesorios, y una pantalla de 27 pulgadas en la cabina trasera. Las puertas del automóvil de cinco asientos de abren al estilo tijera.
"Con el EMotion estamos presentando un diseño futurista y avanzas tecnologías. Ese equilibrio ha permitido que Fisker se conecte de forma especial con sus clientes", acotó el directivo de Fisker.
El EMotion se producirá en Estados Unidos en la segunda mitad del 2018, y se comenzará a comercializar en 2019.
Con la presentación oficial del vehículo, Fisker también exhibió su nueva batería de estado sólido que, según afirmó el CEO, podrá propulsar coches eléctricos con 800 kilómetros de alcance y 1 minuto de carga.
"Nuestros científicos han encabezado un avance en la tecnología de baterías de estado sólido que podrá cargar los vehículos eléctricos en tiempos muy rápidos", acotó Fisker. "Estamos emocionados de exhibir las baterías de estado sólido en un escenario global. Fisker intenta romper barreras, liderar en tecnologías automotrices y finalmente crear los vehículos eléctricos futuristas más deseables y funcionales".
Fisker cree que la producción de las baterías ocurrirá en 2023, aunque intentarán acortar los plazos para 2020.